Querido primo Teo:
El sábado ha sido uno de los días de más expectación en el Festival. La llegada de Nicolas Cage para recoger el Gran Premio Honorífico congregó a las puertas del Melià desde primera hora de la mañana a una multitud que esperaba ver de cerca a su ídolo. Cage llegó y no defraudó. Firmó autógrafos y más tarde posó para los fotógrafos en un concurrido photocall. De pie, sentado, sonriendo, serio, de mil maneras. A veces sorprende que las grandes estrellas tengan un comportamiento tan profesional y aguanten estoicamente los disparos de cámara durante tantos minutos y luego vengan algunas estrellitas (o intento de) patrias y posen con mala cara lo justo y necesario. Fue curioso porque antes de Cage venían los directores de “Summer of 84”, y creo que jamás se hubieran pensado que iban a congregar a tanta prensa. Pobres, si ellos supieran…