"Spider-Man: No way home"

La web oficial.

El argumento: Por primera vez en la historia cinematográfica de Spider-Man, nuestro héroe, vecino y amigo es desenmascarado, y por tanto, ya no es capaz de separar su vida normal de los enormes riesgos que conlleva ser un superhéroe. Cuando pide ayuda al Doctor Strange, los riesgos pasan a ser aún más peligrosos, obligándole a descubrir lo que realmente significa ser él.

Conviene ver: "Spider-Man: No way home" da todo lo que promete a sus fans como un impecable entretenimiento que con los primeros números de taquilla confirma que el nuevo modelo de cine en salas pasa por eventos comerciales (preferiblemente de Marvel) como el que nos ocupa y es que Peter Parker y su versión arácnida, a la chita callando y con Tom Holland como protagonista, se han convertido en el superhéroe favorito y empático para la generación “millennial” y siguientes después de que con las tres películas de Sam Raimi (2002-2007) y las dos de Marc Webb (2012-2014) se fuera asentando a un personaje que ha encontrado en la reciente trilogía de Jon Watts una manera de revitalizar el espíritu del mismo más que caer en la reiteración de personajes y situaciones lo que, por otro lado, ahora ha favorecido una traca final que es el llamado multiverso en el que le introduce su nuevo mentor y que favorece el regreso de los personajes que interpretaron Alfred Molina, Willem Dafoe y Jamie Foxx. Todo jugando con la baza de la nostalgia y de los que han acompañado fielmente al personaje en su andadura cinematográfica y humanizando al personaje en ese momento de inflexión que supone el hecho de que haya sido revelada su verdadera identidad viendo como la exposición pública pone patas arriba su vida.

Un carrusel de emociones de dos horas y media con mucho entretenimiento pero también más emoción y tragedia que humor ya que la cinta es menos ligera que las anteriores asentando el poder, la responsabilidad y el grado de madurez que ha ido alcanzando el protagonista convertido más es un héroe de acción que en un simpático crío. Una apuesta modélica de cómo encajar las piezas de un universo que ha abarcado dos décadas de cine contentando a amplios espectros de públicos e introduciendo elementos y capas de manera orgánica y no sobrecargada pasando de la comedia juvenil a la acción y desembocando en una mirada a ese momento en el que definitivamente se pierde la inocencia y uno toma conciencia de su lugar en el mundo. Todo un espectáculo, ágil, vibrante y emotivo que se aleja de la solemnidad oscura para rendir tributo a los fans y recuperar las sensaciones de la experiencia colectiva que da el cine.

Conviene saber: Continuación de "Spider-Man: Homecoming" (2017) y "Spider-Man: Lejos de casa" (2019).

La crítica le da un SIETE