"Gett: El divorcio de Viviane Amsalem"

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El argumento: Viviane Amsalem, separada desde hace años de Elisha, su marido, quiere conseguir el divorcio para no convertirse en una marginada social. En Israel no existe aún el matrimonio civil; según las leyes religiosas, sólo el marido puede conceder el divorcio. Sin embargo, Elisha, se niega a hacerlo. Viviane tendrá que luchar ante el Tribunal Rabínico para lograr lo que ella considera un derecho. Así se verá inmersa en un proceso de varios años en el que la tragedia competirá con lo absurdo y absolutamente todo se pondrá en tela de juicio.

Conviene ver: “Gett: El divorcio de Viviane Amsalem” es un intenso drama judicial que supera cualquier intriga política de altos vuelos. Recordando las escenas ante el juez de “Nader y Simin, una separación”, o el repudio que se contaba en “Kadosh” de Amos Gitai, esta propuesta israelí va a más con ello ya que toda la película es muy teatral desarrollándose tanto en el tribunal rabínico como en la sala de espera. Haciendo de la austeridad virtud vemos en la mirada de esa mujer la realidad de toda una sociedad misógina y machista que no permite que la mujer se desligue del hombre siendo considerada todavía en estos tiempos en determinadas sociedades como una propiedad. Y más cuando el divorcio puede generarle libertad pero también catalogación de apestada social. Incomprensión, patriarcado y falta de dignidad en los ojos de una estupenda Ronit Elkabetz en un proceso casi kafkiano en el que miradas, silencios, ideas cerriles y parcialismos se dan la mano. Una película ágil y dinámica, accesible y con mensaje, gracias a un guión sólido que sin salir de esa habituación muestra toda una realidad también con algún giro que acrecienta el interés y unos buenos diálogos que enriquecen la cinta y que la hacen muy interesante desde el punto de vista cinematográfico y también el sociológico.

Conviene saber: Tercera parte de la trilogía sobre el matrimonio y la familia de los hermanos israelíes Ronit y Shlomi Elkabetz. Candidata oficial de Israel para representar al país en la 87ª edición de los Oscar en la categoría de mejor película en habla no inglesa.

La crítica le da un OCHO