“Flora y su hijo Max”

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El argumento: Flora, madre soltera, no sabe qué hacer con su rebelde hijo adolescente, Max. Animada por la policía a buscarle un pasatiempo, Flora intenta entretenerlo con una guitarra acústica destartalada. Con la ayuda de un músico de Los Ángeles venido a menos, Flora y Max descubren el poder transformador de la música.

Conviene ver: El director John Carney, responsable de “Once”, vuelve a adentrarse en el musical, un terreno en el que se siente especialmente cómodo y más cuando lo convierte en un retrato social. “Flora y su hijo Max” se centra en una joven madre soltera de un hijo adolescente y problemático que encuentra un estímulo en la música, a través de un curso de guitarra impartido por un músico de Los Ángeles sin demasiada fortuna. John Carney sigue fiel a sí mismo, rodando una película que por un lado es deudora del cine británico social, teniendo en mente a directores como Mike Leigh e incluso Ken Loach, y por el otro de las comedias independientes que triunfaron en la década de los noventa. Su protagonista es una joven que es incapaz de valorarse, porque su vida le ha hecho ver que es una perdedora. Es una madre soltera, su hijo es problemático y ella tampoco se ha esforzado en que las cosas le vayan mejor. A duras penas puede salir adelante trabajando de niñera y es tendente a buscarse líos, especialmente con su ex.

Ve que su hijo va encaminado a convertirse en un delincuente más de la calle y ella le regala una guitarra destartalada para que la vea como una alternativa, pero eso a él le parece algo completamente desconectado del siglo XXI en el que la música se hace a través de los programas informáticos. Flora querrá aprender a tocar la guitarra y después de buscar canales de YouTube se topará con un músico que le impartirá clases a través de Zoom y con quien descubrirá todo ese potencial que le animará a afrontar la vida de otra manera con la música como vía para conectar y no para buscar la aprobación fácil y efímera. Eve Hewson, hija del cantante Bono, está deslumbrante encarnando a esa madre soltera que busca de alguna manera la redención y que es capaz de hacer todo por su hijo, el que será siempre el verdadero hombre de su vida. Lo mismo se puede decir de Joseph Gordon-Levitt como ese músico que parece una estrella del rock nacida a destiempo. “Flora y su hijo Max” habla del poder de sanación a través de la música con pizcas de humor, emoción y crítica social. Sin aportar nada nuevo, Carney narra de una manera sencilla, sincera, descarada y mostrando amor hacia sus personajes.

Conviene saber: John Carney regresa al cine con esta historia musical sanadora tras "Once" (2007), "Begin again" (2013) y "Sing street" (2016). La cinta ha pasado por Sundance 2023 (donde fue comprada por Apple TV+ por 20 millones de dólares) y Toronto 2023.

La crítica le da un SIETE