"El viento se levanta"
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La web oficial.
El argumento: Narra la historia de Jiro Horikoshi, el hombre que diseñó varios de los cazas japoneses durante la II Guerra Mundial y cómo su trabajo choca frontalmente con su espíritu sensible y apasionado. Todo ello con el trasfondo de la emocionante historia de amor que le mantuvo al lado de su mujer en los peores momentos de sus vidas.
Conviene ver: Es probable que muchos cinéfilos entren en la sala en la que van a disfrutar de la que, se supone, ha de ser la última película de Hayao Miyazaki con cierta reverencia, con la impresión de que se cierra una de las filmografías más interesantes del cine contemporáneo (animación o no). No hay en ella alegatos antibelicistas, como sus detractores destacan como una de las faltas de la película, pero sí que es una hermosísima historia de amor que sobrevive y se hace fuerte en tiempos convulsos, los de los avatares de un Japón sufridor a lo largo del siglo XX con pobreza, enfermedades y guerras. También nos muestra como es el alma de un hombre sencillo, sensible y apasionado del diseño aeronáutico, enfrentado al hecho de ver convertidas sus creaciones en armas de guerra. Sensibilidad a todos los niveles, que no sensiblería, y el buen hacer y gusto por el detalle que ha marcado su filmografía en el que posiblemente sea su ejercicio de introspección ética más intensa abandonando el componente fantasioso de su cine apostando por algo más real y con visos históricos. El autor ha cedido a la emoción del creador. La melancolía impregna esta película en la que la mirada clara de sus personajes destaca entre el horror que les rodea y, nuevamente, la música de Joe Hisaishi. Al acabar, no dejas de preguntarte que hay del director en ese ingeniero con gafitas ya que Miyazaki es un apasionado del mundo de la aviación que dio a su Estudio el nombre de un avión italiano y que ya trataba el tema en "Porco Rosso". Si había que poner un broche, debía ser brillante, si bien (puede que) no perfecto.
Conviene saber: Hayao Miyazaki ha anunciado que se retira con el que es su 11º largometraje aunque seguirá relacionado con el estudio Ghibli fundado por él en 1985. Nominada al Oscar 2014 a la mejor película de animación. Está basada en el manga del propio Miyazaki a su vez basado en la novela corta “El viento se alza” de Tatsuo Hori, escrita entre 1936 y 1937.
La crítica le da un SIETE
El que va a ver a Miyazaki sabe bien que tiene que ir dispuesto a encontrarse de todo, y que puede adentrarse en mundos oscuros y psicológicamente complejos, que pueden no llegar a entenderse pero que impactan visualmente. Y eso puede ser algo tan bueno como malo a la hora de entender su cine.
Sin embargo, hay que decir que en El viento se levanta estos mundos extraños dejan paso a una preciosa historia de amor temporal, e intemporal, de ritmo pausado y cadencioso (con lo que se recomienda ir descansado al cine) y adornado con aire, viento, frescura, historia, y sentimiento.
La estética es fresca, colorida, abierta, como si volases en la película en muchos momentos, y también un reflejo histórico adornado de color, sobre algunos eventos de la historia de Japón, que supongo que allí tendrán su repercusión y moverán sentimientos que aquí no mueve, por la lejanía y desconocimiento.
Un 7 se me queda cortito, y si bien no es una obra redonda porque resulta ligeramente lenta, sería justo ponerle un 8 o hasta un 9.