"Creed"

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El argumento: Adonis Johnson no llegó a conocer a su padre, el campeón del mundo de los pesos pesados Apollo Creed, que falleció antes de que él naciera. Sin embargo, nadie puede negar que lleva el boxeo en la sangre, por lo que pone rumbo a Filadelfia, el lugar en el que se celebró el legendario combate entre su padre y Rocky Balboa. Una vez allí, Adonis busca a Rocky y le pide que sea su entrenador. A pesar de que este insiste en que ya ha dejado ese mundo para siempre, Rocky ve en Adonis la fuerza y determinación que tenía su enconado rival, y que terminó por convertirse en su mejor amigo. Finalmente, acepta entrenarle a pesar de estar librando su propio combate contra un rival más letal que cualquiera a los que se enfrentó en el cuadrilátero.

Conviene ver: "Creed" es el resurgir inesperado del personaje de Rocky en una séptima película cuando todo parecía más que cerrado hace una década en “Rocky Balboa”. Como ya hicieron esta temporada “Mad Max” y “Star Wars” se ha hecho una puesta a punto y se ofrece una nueva historia que evoca a los orígenes de la primera película, repitiendo el esquema pero actualizándolo a los tiempos actuales y con ese mentor (Han Solo en la saga galáctica y el viejo zorro Rocky en esta, una sombra de lo que fue pero reconvertido en entrenador) como apoyo en la sombra calzándose Sylvester Stallone los zapatos de lo que supuso para él el personaje de Burgess Meredith. Ryan Coogler salta del circuito independiente a tomar las riendas de una saga que fue toda una revolución con la primera película pero que después de fue agotando estirando la fórmula de este proyecto personal de Stallone hasta llegar a un nostálgico último round en forma de epílogo. Esta película suena a posibilidad de nuevo relanzamiento cediendo el testigo Rocky al hijo de su icónico rival y amigo, Apollo. La cinta toca todos los clichés del género pero su fuerza son lo bien rodados que están los combates y ese ejercicio de resistencia que impregna a Rocky y que bebe de ese enfrentamiento entre Muhammad Ali y George Foreman cuando el primero parecía vendido. A destacar el cuidado formal de la película, el respeto al original (las escaleras del Museo de Arte de Philadelphia o la música de Bill Conti) y la profundidad épica y dramática de la historia que la eleva como película dándole una pátina de nostalgia que emocionará a los que han crecido con Stallone y sus películas de Rocky y que atrapará a nuevos públicos. Sólo algunos obvios puntos en la relación mentor/pupilo o en la trama romántica de la película le restan frescura a la cinta. El oficio de Ryan Coogler con algún portentoso plano secuencia, el carisma de Michael B. Jordan y el empeño de Stallone, que se presenta como una mole deambulante y desgastada pero con honda dignidad y espíritu de supervivencia, logran que “Creed” quede muy lejos de ser el K.O. de Rocky Balboa.

Conviene saber: Sylvester Stallone es candidato al Oscar 2016 en la categoría de mejor actor de reparto.

La crítica le da un SIETE