"Wish: El poder de los deseos"

La web oficial.

El argumento: Asha y una pequeña bola de energía ilimitada llamada Star demuestran que cuando la voluntad de un ser humano valiente se conecta con la magia de las estrellas, pueden suceder cosas maravillosas.

Conviene ver: “Wish: El poder de los deseos” es la película con la que Disney celebra su centenario siendo una cinta que es un buen resumen a su trayectoria y con la que pretende reivindicar eso tan intangible y de la que la compañía ha intentado sacar tanto rédito como es eso de la magia. Un “grandes éxitos” con poca personalidad que le hace ser un ejercicio vistoso pero poco memorable en el que hay muchas ideas recicladas y sólo algún número que aporte algo agradeciéndose que no llegue a las dos horas. Una oda a la nostalgia con un espíritu algo tontorrón que en esta ocasión no se preocupa ni por trascender ni por transgredir en su mensaje ya que el hecho de tener como protagonista a una joven lugareña, una bola de energía y un reino mágico da para lo que da desarrollándose en una isla mediterránea con ecos a la arquitectura andaluza y con alguna idea vistosa como esas burbujas en las que están los deseos de los habitantes que nunca serán concedidos. Un film que, con la responsabilidad de concebirse como una fiesta para el aniversario, está repleta de guiños a la esencia Disney con una protagonista que recuerda a Mulán, Mérida o el Hada Azul acompañada de animales del bosque frente al poder absolutista del Rey Magnífico, uno de los villanos más destacados del Disney reciente. En este caso ni la chispa ni el poder de la música comparece en el que es el 62ª largometraje de la compañía que demuestra que, tras resurgir esto últimos años reivindicando a la heroína guerrera más que a la princesa, la reivindicativa más que la resignada, Disney vuelve a estar corto de ideas a pesar de una loable mezcla de ilustración 2D y 3D y el buen trabajo de Ariana DeBose y Chris Pine en la versión original de una cinta que reivindica los deseos y los sueños pero que también empuja a luchar, tanto desde uno mismo como desde la fuerza de la colectividad, para que puedan hacerse realidad.

Conviene saber: La cinta está dirigida por Chris Buck (“Frozen. El reino del hielo”) y Fawn Veerasunthorn.

La crítica le da un CINCO