"Un blanco fácil"
La web oficial.
El argumento: La historia real de Maureen Kearney, la principal representante sindical de una potencia nuclear multinacional francesa. Se convirtió en denunciante, denunciando acuerdos de alto secreto que sacudieron el sector nuclear francés. Sola contra el mundo, luchó con uñas y dientes contra ministros del gobierno y líderes de la industria para sacar a la luz el escándalo y defender más de 50.000 puestos de trabajo. Su vida dio un vuelco cuando fue asaltada violentamente en su propia casa...
Conviene ver: “Un blanco fácil” nos presenta a una combativa Isabelle Huppert que es la absoluta estrella de un título que se sumerge en la historia real de Maureen Kearney, representante sindical de una multinacional nuclear francesa que se las tuvo tiesas con los poderes no dudando en denunciar lo que estaba sucediendo en un nuevo episodio de corrupción política y empresarial. Una mujer fuerte y decidida pero también vulnerable que es descubierta en el sótano de su casa el 7 de diciembre de 2012, maniatada, violada y agredida marcándole una A en el estómago. Un episodio poco tratado y que se revela en esta cinta que parte del descubrimiento de unos documentos que involucran al nuevo jefe de la empresa (AEAVA) y que la sindicalista no duda en denunciar para evitar un gran número de despidos frente a la inoperancia del recién elegido gobierno socialista de François Hollande. Lo más interesante de la película es como la protagonista es justiciera pero también víctima y como su carácter fuerte y decidido le condiciona tanto frente a los que mandan (al ser alguien incómodo) como a la hora de ser creída por su ataque ya que al ser tan fría y objetiva en su narración (y no dejarse llevar por las emociones) hace que la policía y los que la tienen que proteger no la crean. Un thriller más que solvente que muestra las miserias de un sistema podrido y que se sustenta en la codicia y la mentira con tal de seguir dando aire a los intereses que nutren a los que mandan y que se aprovecha de una sociedad adormecida y acelerada que hace que unos escándalos tapen a otros y que, frente a la indignación inicial, hace que el tiempo haga que todo se olvide bajo la alfombra. Una cinta valiente y con mala leche pero que quizá lo deja todo demasiado centrado en el talento de su protagonista no teniendo la fuerza y el empaque necesario por momentos destacando también a un buen número de secundarios habituales del cine galo como Alexandra Maria Lara, Benoît Magimel, Marina Foïs, Yvan Attal, Grégory Gadebois o Pierre Deladonchamps.
Conviene saber: El director Jean-Paul Salomé y la actriz Isabelle Huppert vuelven a coincidir tras "Mamá María" (2020).
La crítica le da un SEIS