Sitges 2023: La opresión de las mujeres en Pakistán, lluvia ácida en Francia, bullying en Malasia y colonialismo en Chile
Querido primo Teo:
Hoy he soltado la cámara y me he pasado el día viendo pelis y pasando en la sala. Nada de fotos, sólo ir alternando butaca entre el Auditori y Tramuntana y rematar el día con la firma del libro de “Robot dreams” por parte de su autora Sara Varon y Pablo Berger, ¡qué majo es este hombre por Dios!, no me canso.
En "In flames", tras la muerte del patriarca de la familia, una madre y su hija deben aprender a sobrevivir en un mundo dominado por los hombres sacando fuerzas y uniéndolas para luchar también contra unas fuerzas malévolas que las acechan. Un más que correcto thriller psicológico con un guión sólido y lleno de crítica social y denuncia de la opresión a la que se somete a las mujeres en Pakistán que avanza lento pero seguro y consigue crear desasosiego. Desgarradora la mirada de la protagonista que logra expresar sin palabras todo lo que un millón de frases podrían narrar.
“Acide” es el film apocalíptico que podemos ver cada año en Sitges. La lluvia ácida amenaza Francia y una familia empieza su éxodo huyendo de este fenómeno natural que, sin duda, acabará con su vida. Un guión trepidante casi desde el principio lleno de tensión y con el trasfondo de la inmigración y sus consecuencias, quizá llega al final de forma demasiado atropellada lo que provoca que todo lo frenético que has visto antes quede diluido en un final que podría considerarse un poco flojo.
“Tiger stripes”, muchas ganas de ver la escogida por Malasia para representar al país en los próximos Oscar. La directora estuvo en 2019 en un piching que se celebra aquí en el Festival germinando la película que ahora ha visto la luz en el Auditori en sesión de tarde. Un film de terror costumbrista y con folclore y sobre todo con mirada femenina que se centra en la historia de Zaffan que con 12 años pasa de la niñez a ser mujer y se ve rechazada por su grupo de amigas.
Una historia que trata el tema del bullying, la adolescencia, la amistad y sobre todo el sentirse rechazado por como eres y lo importante que es aceptarse uno mismo. Todo ello rodeado de toques fantasmagóricos y criaturas. Si en su día dije que Ernesto Alterio debería llevarse el premio al mejor actor, Shaheizy Sam debería ganar el de mejor actriz por la interpretación tan brutal y llena de matices que ofrece en esta película.
El título de "Sorcery" no puede ser ya más esclarecedor. Cuando el padre de Rosa es brutalmente atacado la niña huye de la granja donde trabajaban para buscar justicia con la ayuda de un hechicero. Drama rural lento, oscuro que reflexiona sobre el colonialismo con un tinte sobrenatural que es la brujería utilizada por los nativos chilenos. Para algunos tedioso para otros una pequeña delicia costumbrista.
Tu prima.
Imogen