"Sintiéndolo mucho"
La web oficial.
El argumento: Retrato de Joaquín Sabina sin bombín, hecho a muy pocos centímetros de su piel, con nocturnidad y alevosía, por su amigo, el cineasta Fernando León de Aranoa. Un relato como su voz, áspero, directo y sin ecualizar, que cuenta sin atenuantes la intimidad del artista, sus bambalinas, su cara B. Que comienza cuando baja del escenario, que le acompaña en lo cotidiano, y así en lo inesperado: en la risa y en el drama. “Sintiéndolo mucho” es el resultado de trece años de rodaje juntos, y recorre todos los escenarios de Joaquín Sabina, públicos y privados, luminosos y ocultos. Un paseo por las claves de su vida y de su trabajo: por lo que le mueve, por lo que le inspira, por lo que le duele, desarrollado siempre a partir de situaciones vivas, compartidas, entre músico y cineasta.
Conviene ver: “Sintiéndolo mucho” es el documental en el que Fernando León de Aranoa ha pegado su cámara durante 13 años a Joaquín Sabina a través de conciertos, anécdotas y entrevistas rindiendo tributo al cantante, al icono y al legado de uno de los artistas musicales más influyentes del último medio siglo en España. Una mirada a los miedos que hay detrás del artista y a esa vida intensa y con altibajos de la que ha hecho gala el cantante y letrista. Un proyecto que se sustenta en esos momentos previos a los conciertos, entre preparativos y conversaciones en el camerino, tensión que tiene analogía con lo que siente un torero antes de salir de la plaza y que el director mantiene durante la película ante la pasión taurina del artista que en los últimos años se ha asociado con Leiva, el cual también aparece en este documental (y ha sido productor del mismo). Un documental que parte de la brutal caída en un concierto en el Wizink Center de Madrid pocas semanas antes de la irrupción de la pandemia en 2020 y que se adentra en la personalidad, gracejo e ideas de un tipo singular que destila encanto canalla y también cabezonería socarrona en este documental que parte de las entrañas de un músico y en el que la cámara sólo es testigo sin tomar protagonismo en ningún momento ya que el que manda es sobre el que se pone el foco, un tahúr noctámbulo y poeta, amante de las artes y los placeres de la vida, que ha recuperado el entusiasmo en un trabajo que le reivindica, homenajea y descubre a pocos meses de iniciar una nueva gira.
Conviene saber: Nuevo documental de Fernando León de Aranoa tras “Caminantes” (2001), “Invisibles” (2007) y “Política, manual de instrucciones” (2016).
La crítica le da un SEIS