¿Qué fue de... Patty Duke?

Querido primo Teo:

Sabes que hay una máxima en los Oscars. Si protagonizas un biopic, a no ser que sea el de Joan Crawford, y tu personaje tiene una tara, hay un altísimo porcentaje de ganar la estatuilla. Patty Duke cumplió esos requisitos y, con tan solo 16 años, recogió la estatuilla a la mejor actriz de reparto por "El milagro de Ana Sullivan", gracias a su interpretación de Helen Keller, la primera sordociega que logró obtener el bachillerato y que posteriormente se convertiría en escritora y en activista política. Aunque Duke logró ser una personalidad televisiva, su carrera cinematográfica no tuvo continuidad.

Nuestra protagonista nació con el nombre de Anna Marie Duke en el barrio de Queens (Nueva York) hace 66 años. Su infancia no fue nada feliz. Su padre era alcohólico y su madre era una mujer violenta que sufría severos episodios de depresión. Con seis años fue abandonada por su madre y, dos años después volvió a ocuparse de ella, y fue en este momento cuando comenzó a moverla para que se dedicase a la interpretación. Se buscó a dos agentes especializados en actores infantiles, John y Ethel Ross, que le cambiaron el nombre, y que no se comportaron de una manera ejemplar, mintieron sobre la edad de la niña, era mayor de lo que realmente decían, le inflaron el currículum, la explotaron a más no poder, y le suministraban drogas y alcohol. Patty debutó en la televisión, protagonizando anuncios, interviniendo en telenovelas y en concursos, uno de ellos fue "The $64.000 question" emitido en el año 1958 y ganó la friolera de 32.000 dólares. Tres años después se descubriría que aquél concurso estaba amañado y la joven actriz tuvo que declarar en una Comisión del Congreso.

Su gran oportunidad le llegó en el año 1959 gracias a la obra "El milagro de Ana Sullivan" escrita por William Gibson y basada en la autobiografía de Helen Keller en donde la actriz interpretaba a la escritora en su niñez, su compañera de reparto era Anne Bancroft y estaba dirigida por Arthur Penn. Gozó de un gran éxito y se mantuvo dos años en cartel, tanto la obra como Bancroft y Penn se alzaron con el premio Tony, y Patty Duke también fue galardonada por su interpretación. En el año 1962 llegaría la adaptación cinematográfica, dirigida por el propio Penn, y que contaba con las mismas intérpretes, aunque ninguna de las dos las tenía todas consigo ya que Bancroft no era una estrella y Duke ya superaba con creces la edad requerida, tenía 15 años y el personaje a interpretar tenía la mitad. El film gozó del éxito y cosechó muy buenas críticas. Cosechó cinco candidaturas a los Oscars y logró dos estatuillas, la de mejor actriz para Anne Bancroft y la de mejor actriz de reparto para Patty Duke. Esta última tenía como competidoras a actrices de la talla de Angela Lansbury por "El mensajero del miedo", Shirley Knight por "Dulce pájaro de juventud" o Thelma Ritter por "El hombre de Alcatraz". Hasta la llegada de Tatum O´Neal, de la que te hablé en su día, Patty Duke ostentó el récord de intérprete más joven ganadora de un Oscar. La actriz se alzó también con el Globo de Oro a la estrella emergente.

Tras la estatuilla, la carrera de Duke se desarrolló en la pequeña pantalla, llegando a tener su propia serie "The Patty Duke show", en donde la actriz interpretaba los dos personajes principales. Gracias a esta serie, por la que fue nominada al Emmy, su popularidad subió como la espuma, pero ella no dejaba de sentirse como una muñeca explotada por sus agentes que se quedaban con casi todo el dinero que ganaba. Con 13 años ya dependía totalmente de las drogas, suministradas por sus agentes, y del alcohol, y John Ross llegó a abusar sexualmente de ella. Cuando Patty alcanzó la edad de 18 años logró independizarse de sus agentes y descubrió que estos habían dilapidado toda su fortuna. En este momento, la actriz supo que tenía un duro camino por delante, ya que el público difícilmente iba a aceptar que ya era adulta. Su primer gran papel de este tipo lo interpretó en "El valle de las muñecas" que se convirtió en un film taquillero a pesar de que a la crítica y al público le costaba verla interpretar a una cantante alcohólica y drogadicta. Este papel estuvo a punto de arruinar su carrera. También protagonizó junto a un debutante Al Pacino la película "Yo, Natalie" por la que se alzó con el Globo de Oro y que fue un sonoro fracaso de público. Regresaría a la televisión con la serie "My sweet Charlie" con la que recibiría su primer premio Emmy, su discurso de agradecimiento fue tan confuso que muchos pensaron que la actriz estaba bajo los efectos de las drogas. En realidad, Duke ya mostraba síntomas de un trastorno bipolar que le sería diagnosticado en el año 1982, doce años después de este episodio. Siguió trabajando con éxito en la televisión, y recibió otros dos Emmys por "Capitanes y reyes" y "El milagro de Keller", una revisión de la obra que le dio a conocer en donde la actriz esta vez interpretó a Ana Sullivan. Durante años, la Duke se ha especializado en interpretar el rol de madre justicia en infinidad de telefilmes. En el año 1985 se encargó de presidir el sindicato de actores. También tuvo una exitosa carrera musical.

En el año 2000 decidió frenar su ritmo de trabajo, y desde entonces ha realizado contadas intervenciones en la televisión, últimamente en la serie "Hawaii 5-0" y volvió a los escenarios de Broadway en el 2002 gracias al musical "Oklahoma!", también ha intervenido en el musical "Wicked". Su corazón le dio un susto en el año 2004, por lo que tuvo que ser sometida a un bypass, y en los últimos años ha protagonizado varias campañas de servicio público promoviendo la Seguridad Social, también está muy volcada en su actividad concienciadora sobre la salud mental. Se ha casado en cuatro ocasiones, con el director Harry Falk, con el promotor de rock Michael Tell, padre biológico del actor Sean Astin, con el actor John Astin, el célebre Gomez de la serie "La familia Addams", y con el militar Michael Pearce, con quien adoptó a su segundo hijo, Kevin, que trabaja como bombero. Patty Duke reside con su marido en Hayden (Idaho).

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Saludos.
Mary Carmen Rodríguez