"Nosotros no nos mataremos con pistolas"
La web oficial.
El argumento: Mientras el pueblo se prepara para celebrar su fiesta mayor, Blanca se esmera en que la primera paella que hace en su vida le quede perfecta. Ha conseguido reunir a sus amigos de toda la vida después de años sin verse. Todos están en la treintena y sienten que la juventud se les escapa, atrapados en la precariedad laboral, el desencanto y un continuo volver a empezar. La paella se alarga hasta el anochecer, entre revelaciones de secretos, reproches y equívocos. Pero ahora más que nunca, los cinco amigos se necesitarán unos a otros para salir adelante.
Conviene ver: “Nosotros no nos mataremos con pistolas” es una reunión que llevan a cabo varios amigos treintañeros en torno a una paella en un pueblo levantino, un reencuentro tras mucho tiempo sin verse en el que aflorarán en una larga velada todas las frustraciones y secretos que arrastra una generación “millennial” desencantada, a la que se prometió todo y que ahora tiene que lidiar con unas cartas cambiadas y no muy favorecedoras en la partida de la vida. Ingrid García-Jonsson, Elena Martín, Joe Manjón, Lorena López y Carlos Troya protagonizan una cinta con indudable estética western tanto en su fotografía como en unos personajes baqueteados que se necesitan más que nunca tras un suceso trágico y que caldea un subtexto en el que hay miedo a mostrar la vulnerabilidad valiendo más el silencio que lo que se acaba verbalizando en una atmósfera sugerente y poco convencional. La pérdida, la salud mental, el desengaño del presente y el vértigo hacia el futuro vertebran esas conversaciones llenas de inseguridades, pero también de clichés, sustentadas en los recuerdos, la nostalgia de la adolescencia que les unió y el peso de la persona ausente mientras se foguean las brasas de una paella que sirve, junto al calor, la cerveza, la proximidad del mar y un baile liberador, de elemento de terapia para asumir el fracaso, sanar heridas y afrontar lo que venga, al menos, sintiéndose más acompañado al compartir ese dolor que en fondo es compartido aunque intente ocultarse a los demás. Los actores elevan el texto y la propuesta de una directora que, siendo uno de sus trabajos más interesantes, no termina de arrebatar por ese aire casero tan propio de ser un proyecto levantado durante la pandemia.
Conviene saber: María Ripoll dirige la adaptación de la obra de teatro de Víctor Sánchez Rodríguez que compitió en el Festival de Málaga 2022.
La crítica le da un SEIS
maravillosa película. Una de las sorpresas del año
Una de las obras maestras del reciente cine español.