"Los indeseables"
La web oficial.
El argumento: Tras la repentina muerte del alcalde de la ciudad, Pierre, un joven médico idealista, es nombrado para sustituirle. Pretende continuar la política de su predecesor, que soñaba con rehabilitar este barrio obrero. Haby, una joven francesa de origen maliense que vive en uno de los bloques de pisos en ruinas, se niega a que su familia sea expulsada del barrio donde creció.
Conviene ver: Ladj Ly, cuando dirigió "Los miserables" (2019), película que se llevó el premio del Jurado en el Festival de Cannes, fue elegida por Francia para representarla en los Oscar, alcanzando finalmente la nominación. Desde entonces el director francés, que inició su carrera como documentalista y que también promueve un proyecto de escuelas de cine para contar este tipo de historias, ha producido otra de las propuestas francesas más interesantes de los últimos años como lo es "Atenea" (2022) de Romain Gavras, en la que continuaba profundizando sobre las minorías raciales que viven en barrios marginados en Francia, mostrando una cara B de lo que tenemos en mente de París de una forma descarnada, violenta y reflexiva. "Los miserables" funcionaba como thriller, "Atenea" funcionaba como película bélica, y en este caso de "Los indeseables" intenta ser un drama rutinario social que, a pesar de contar con más medios y más ambición, se queda corto en todos los aspectos que parte de un plan de renovación urbana llevada a cabo por los políticos que destruyó unas torres de viviendas sociales dejando a muchas personas y familias numerosas sin hogar. Es cierto que una película como "Los miserables" tenía ciertos efectismos que por momentos te sacan de la película, pero continuamente la estructura de thriller te vuelve a meter de lleno. En "Los indeseables" Ladj Ly pone el foco en el drama de la vivienda a través de la especulación inmobiliaria que deja a los más pobres como principales víctimas, sin voz ni voto. Un ejercicio de dignidad ciudadana a través de la joven musulmana de origen maliense que inicia la protesta de sus vecinos en contra de las prácticas del nuevo alcalde, sin atisbo de corrupción pero sí radical en sus propuestas, intentando desde su activismo cambiar las cosas desde arriba, y que parte ya de una situación precaria, la de los “banlieus”, las zonas del extrarradio de las ciudades de Francia en las que la población inmigrante vive prácticamente en guetos y en la que ni siquiera hay espacio para poder trasladar un ataúd en viviendas de espacio reducido y calles que son un polvorín. Fragmenta la narración contando varias historias y varios conflictos al mismo tiempo, y ninguno de ellos termina siendo ni más ni menos interesante que el de al lado, convirtiéndose a partir de la trampa a través del guion, la trampa a nivel visual y los efectismos a nivel interpretativo en un ejercicio de intento de reflexión y denuncia que termina sacando continuamente al espectador, confrontando todo el tiempo sobre excesos de dramatismo y algunas cuestiones raciales, ideológicas y sociales que ya están muy manidas y que, a pesar de que un sector altamente conservador todavía necesite que se le recuerde estas ideas, no son ni el potencial del público, por lo tanto queda en algo que ya hemos visto anteriormente solo que peor contado y sin ningún tipo de estímulo más allá de un esfuerzo visual de impacto por momentos. Un canto de reivindicación vecinal frente a los desahucios, acoso policial, la inacción de los gobiernos y la demolición de los barrios a través del cine como medio para dar voz a las condiciones de vida de esos lugares testimonios de la desidia y del racismo clasista acumulado de tantos años y que defiende la colectividad y la unión de los desfavorecidos frente a los intereses de unos políticos que sustentan un sistema que expulsa a los marginados que viven en suburbios a su suerte, sin medios y sin esperanza como reflejo de una brecha social cada vez más profunda y con pocos visos de solución con un país cada vez más radicalizado al borde de un caos social sin marcha atrás y con consecuencias imprevisibles.
Conviene saber: En la sección Perlas del Festival de San Sebastián 2023.
La crítica le da un SEIS