In Memoriam: Bud Spencer, mamporreando
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Querido Teo:
A los 86 años ha fallecido Bud Spencer, una de esas figuras reconocibles y que ilusoriamente pensamos que son inmortales. Un tío duro con aspecto bonachón al que siempre se le recordará por repartir mamporros sin inmutarse y por ese dúo que formó con Terence Hill. Además fue guionista, productor, compositor y cantante, además de deportista batiendo records y ganando medallas en el campo de la natación durante la década de los 50. Consiguió ser durante diez años campeón de Italia en los 100 metros libres y representó a su país en los Juegos Olímpicos de Helsinki (1952) y Melbourne (1956) en natación y waterpolo.
Nacido como Carlo Pedersoli, y conocedor de seis idiomas, cuando inició su carrera cinematográfica se cambió el nombre homenajeando a su actor favorito (Spencer Tracy) y a su cerveza preferida (Budweiser). “Dios perdona… yo no” (1967) fue la primera película del tándem Hill/Spencer consiguiendo su primer éxito con “Le llamaban Trinidad” (1971). A partir de ahí infinidad de spaghetti western y películas de acción de medio pelo pero con el encanto de tener su aparatosa figura repartiendo leña. El reconocimiento a un estilo y a una manera de exportarlo fue reconocido con un David di Donatello honorífico en 2010.
Nacho Gonzalo
