In Memoriam: Betty White, la primera dama de la televisión
Querido primo Teo
Betty White iba a cumplir los 100 años este próximo 17 de Enero y la ilusión de llegar al centenario le hizo estar inmersa en los preparativos para conmemorar su siglo. Protagonizó la última portada de la revista People, en donde agradecía el hecho de estar en tan buena forma y sin haber tenido serias complicaciones en su salud, y también era habitual que en su red de Instagram se promoviera a quien iba a patrocinar dicho evento. La muerte le sorprendió en la noche del jueves 30 de Diciembre en su casa de Brentwood (Los Angeles). Ha sido su agente, Jeff Witjas, quien ha confirmado su fallecimiento a Variety y ha expresado que aunque la legendaria actriz estuviera a punto de cumplir los 100 años pensaba que viviría para siempre, algo que ha quedado patente en las reacciones tras una noticia que a más de uno le ha amargado el final de año.
Los espectadores de televisión han quedado huérfanos porque la presencia de Betty White en la pequeña pantalla se ha prolongado durante siete décadas y, a diferencia de lo que ha podido suceder con muchísimas figuras, su esplendor nunca decayó y las nuevas generaciones han adoptado a la actriz como un icono "millennial".
“La chica de la tele” (1970-1977) y sobre todo “Las chicas de oro” (1985-1992) hicieron de ella un icono cultural cuyo legado va a mucho más que su faceta como cómica. La casualidad ha hecho que durante el 2021 hayan fallecido también todos los integrantes de "La chica de la tele" que todavía quedaban vivos (Cloris Leachman, Gavin MacLeod, Ed Asner y ahora la entrañable Betty White).
Nacida en Illinois, Betty White se trasladó a Los Angeles a la edad de 18 años, con las ilusiones de ser actriz, y comenzó su carrera como modelo. Era guapa sin ser despampanante, lo que la convertía en un prototipo de "vecinita de al lado", era esa chica soñada por cualquier madre para su hijo, de hecho se le fabricó un romance con Liberace para calmar el mosqueo de la hiperprotectora progenitora del afamado pianista. Pero más que esa belleza para casarse, lo que le hizo destacar era su voz que le permitió iniciarse como actriz en el mundo de la radio y fue habitual escucharla en los programas y seriales radiofónicos.
En 1949 dio el salto a la televisión inicialmente como azafata en un programa de variedades pero los de "la caja tonta" no tardaron en darse cuenta del enorme potencial que tenía ya que, además de guapa, era divertida y poseía un carisma arrollador. Pasó a ser presentadora, especialmente de concursos, y posteriormente se convirtió en actriz y en productora. Betty White fue una de las pioneras en el campo de la producción ya que se convirtió en una de las primeras mujeres que lideraron una empresa de producción y asumieron el control creativo, tanto delante como detrás de las cámaras, presionando incluso para impulsar a las mujeres en el campo de la dirección, todo eso durante la década de los 50, cuando ésto no se hacía por abanderar una causa sino por convicción y valentía. Creó la serie “Life with Elizabeth” (1952-1955) que fue concebida para competir con “I love Lucy” (1951-1957) de Lucille Ball, y que fue galardonada con el Emmy en 1952.
Betty White se casó en tres ocasiones, con Dick Barker, Lane Allen y con el presentador Allen Ludden que fue el gran amor de su vida y que la dejó viuda en el año 1981. Cuando se casó con él su carrera profesional pasó a un segundo plano. Siguió trabajando, en el cine estuvo a las órdenes de Otto Preminger en “Tempestad sobre Washington” (1962), pero se enfocó a nivel personal para acompañar a su esposo. Su renacimiento llegó en la década de los 70 gracias a la serie “La chica de la tele”, una serie producida y protagonizada por la actriz Mary Tyler Moore, en donde Betty White encarnó a la presentadora Sue Ann Nives, un personaje que se incorporó a la cuarta temporada del aclamado show y que no tardó en hacerse con el respeto de la audiencia y la prensa.
Sue Ann Nives era una mujer que se valía de su encanto para manipular a los demás pero a la que era imposible odiar y Betty White, con su aspecto de no haber roto nunca un plato y su astucia, era perfecta para encarnarlo. White fue galardonada con el Emmy a la mejor interpretación femenina de reparto en una serie cómica en los años 1975 y 1976.
“La chica de la tele” finalizó en la primavera de 1977 y la carrera de White no se resintió a pesar de que fue uno de los pocos personajes de la serie que no tuvo su spin-off (de ahí salieron "Rhoda", "Phyllis" y "Lou Grant"). Tuvo varias series y recuperó su faceta como presentadora de televisión, llegando incluso a tener un programa para concienciar a favor de la defensa de los derechos de los animales que fue una causa con la que estuvo especialmente implicada, y presentó el concurso “Just men!”.
Tuvo que esperar al año 1985 para asentarse en el estatus de leyenda televisiva y emperatriz de la pequeña pantalla gracias al estreno de “Las chicas de oro” en donde Betty White encarnó a Rose Nylund, la viuda procedente de Saint Olaf (Minnesota) que con su ingenuidad y anécdotas no tardó en ganarse el corazón de la audiencia. White se llevó el Emmy a la mejor actriz de comedia por la primera temporada de la serie, el tercero en su cuenta particular.
One of my favorite St. Olaf stories from the Golden Girls is the story about the Great Herring War.
— Christine Celestin-Joseph (@chriscjoseph) December 31, 2021
The story is so absurd that it made Rue McClanahan & Bea Arthur break character. Both actresses couldn’t contain their laughter, but Betty White just powered through the scene. pic.twitter.com/6CU84sfDP9
“Las chicas de oro” estaba protagonizada también por Beatrice Arthur, Rue McClanahan y Estelle Getty y destacó por su inteligencia y descaro para retratar a cuatro viudas de mediana edad que comparten la etapa de la jubilación en una casa en Miami. Curiosamente cuando se inició la serie ninguna de ellas alcanzaba los 65 y, a pesar de la ingenuidad propia de las comedias de situación de la década de los 80, es una serie que no ha perdido la magia y que sigue encandilando a los usuarios de plataformas como Hulu.
Cuando finalizó “Las chicas de oro” en el año 1992 la serie tuvo un continuidad en “El hotel de oro”, que se mantuvo en antena durante una temporada y que conservó a su reparto salvo a la actriz Beatrice Arthur, que no quiso continuar por desavenencias con la producción y la propia Betty White.
Betty White tenía 70 años cuando dejó de encarnar a Rose Nylund pero seguía siendo una presencia impagable en la pequeña pantalla. Participó como estrella invitada en muchísimas series de la década de los 90 y 2000, entre ellas “Ally McBeal” (1999) o un recurrente en "Boston Legal" (2005-2008), protagonizó algunas comedias que no permanecieron demasiado en antena, y en 1996 fue galardonada con su cuarto Emmy por su intervención en “The John Larroquette show” interpretándose a sí misma.
Nunca dejó de trabajar, incluso participó en la telenovela “Belleza y poder” (2006-2009) pero fue a finales de la primera década de este siglo XXI cuando nos encontramos con una nueva faceta de Betty White. Se convirtió en un nuevo icono de la generación "millennial" porque encarnaba perfectamente a la abuela gamberra y de vuelta de todo con la que hemos fantaseado. Eso fue posible gracias a la campaña de Snickers, que causó furor en la Super Bowl de 2010, su intervención en la exitosa “La proposición” (2010) y su participación en el emblemático “Saturday Night Live” que le brindó su quinto Emmy ese mismo año.
El renacimiento del estrellato de Betty White le permitió convertirse en uno de los principales alicientes de “Póquer de reinas” que se mantuvo en antena durante cinco años y por la que fue reconocida con el SAG en dos ocasiones (en 2011 y 2012), y tener su propio programa de telerrealidad.
La galería de trofeos de Betty White se completó con dos Grammy y el SAG honorífico concedido en el 2010. Hasta el final mantuvo su ingenio, lado descarado y compromiso con una industria cada vez más igualitaria y también con la defensa por los animales.
Mary Carmen Rodríguez