"Dumbo"
La web oficial.
El argumento: Holt Farrier cuenta con la ayuda de sus hijos Milly y Joe para cuidar a un elefante recién nacido cuyas orejas gigantes le hacer ser el hazmerreír en un circo que no pasa por su mejor momento. La familia circense de Holt incluye además a la señorita Atlantis, Rongo, Pramesh Singh y su sobrino, la grandiosa Catherine y el magnífico Iván. Max Medici, dueño del circo, se decepciona al saber sobre las enormes orejas del pequeño paquidermo hasta que descubre que es capaz de volar, llevando al circo de regreso a la prosperidad.
Conviene ver: Es una pena que Tim Burton, uno de los genios más significativos del cine de las tres últimas décadas, se haya convertido en prisionero de un estilo de fantasía y excentricidad prostituido por el poder de la industria que le ha quitado mordiente, le ha aburguesado y le ha quitado todo el alma en una serie de proyectos más preocupados por funcionar en taquilla que por dar rienda a sus inquietudes artísticas. Se junta la necesidad de ganar dinero con el aborregamiento de un director que en "Dumbo" está muy lejos de “Eduardo Manostijeras”, “Ed Wood”, “Big fish” o “Sweeney Todd”, que sigue siendo su última gran película. En su nueva cinta estamos ante un artificioso disfrute visual, más pirotécnico que orgánico, colorido y barroco, que a fuerza de saturación de CGI y movimiento pretende imprimir ritmo a una historia que tiene más de “Agua para elefantes” o “El gran showman” que de los otros títulos de la filmografía de Burton. El clásico de 1941 sigue muy presente en nuestra cabeza y en nuestros corazones y esta cinta, al menos, lo que hace es incrementar las ganas de recuperarla ya que estamos ante una propuesta de consumo tan rápido y olvidadizo que pretende tirar de nostalgia pero que no innova lo más mínimo ni deja escenas que, incluso en la cinta original, se movían entre la emoción, la rabia de la condiciones en las que los animales circenses tenían que vivir, o la originalidad artística de escenas psicotrópicas como aquella en la que el elefantito se coge una buena cogorza. Aquí no es sólo protagonista el elefante sino, sobre todo, una familia rota por la pérdida de la madre y un padre que todavía sufre los traumas psicológicos de la guerra y que intentan, juntos todo ellos, encontrar su hueco en su nuevo mundo. Darle la batuta a los humanos, siendo un conjunto de inadaptados hermanados en el ecosistema circense, no favorece la empatía del espectador que no necesitaba de ese recurso en el clásico animado a pesar de contar con unos actores que poco pueden hacer con sus estereotipados personajes y a los que dan vida Colin Farrell, Eva Green, Danny DeVito y Michael Keaton. Lo mejor es que mantiene la emotividad con la relación de Dumbo con su madre, apoyado en un buen diseño del personaje que hace que los ojos del protagonista sean esa mezcla de inocencia, desamparo y energía en la que se mueve, el homenaje al cine y al sentido del espectáculo que reside en ella, y un tercio final lleno de ritmo. Una pena que la cinta no aporte nada nuevo y sólo sea un intento descarado de hacer dinero que, en el fondo, es el objetivo de todos estos títulos que no han llegado recientemente como es el caso “Maléfica” (2014), “Cenicienta” (2015), “El libro de la selva” (2016), “Peter y el dragón” (2016) y “La bella y la bestia” (2017).
Conviene saber: Tim Burton lleva a cabo su segunda película en acción real de un clásico animado de Disney después de “Alicia en el país de las maravillas” (2010).
La crítica le da un CINCO