Conexión Oscar 2023: El círculo se estrecha pero no se define a tres semanas de los Oscar

Querido Teo:

A tres semanas de los Oscar se va estrechando el cerco aunque menos de lo que pretenden los que dan por cerrada ya esta carrera. Al margen de la intuición o la estadística la situación no puede estar más repartida con "Los Fabelman" y "Almas en pena de Inisherin" ganando en los Globos de Oro, "Todo a la vez en todas partes" el Critics’Choice y "Sin novedad en el frente" haciéndose con el Bafta. A la espera del próximo fin de semana, el cual se antoja decisivo con el Gremio de Productores (PGA) y el Gremio de Actores (SAG), ¿cómo se puede definir que está la situación en estos momentos?

Con los números en la mano tendríamos que situar a los Daniels como los favoritos a hacerse con el Oscar tanto en mejor película como en mejor dirección. Es verdad que conseguir el Gremio de Directores (DGA) les hace dar un paso casi decisivo (habiendo dejado en la cuneta a Steven Spielberg que no ha tenido el paseo reverencial que se esperaba) pero aún está muy abierta la situación en mejor película.

A pesar de que sea una película novedosa, rompedora y transgresora, lo que le ha hecho ganarse adeptos importantes en una industria deseosa de nuevos estímulos, a nadie se le escapa que con "Todo a la vez en todas partes" estamos ante un fenómeno de burbuja auspiciado por cierta corriente “millennial” (o que se siente como tal) y de redes sociales que, por otro lado, desespera al espectador más clásico ante su batiburrillo de multiversos y planteamientos temporales.

Es por ello que la gran pregunta es comprobar como responderá ante el voto de consenso (con el que se elige a la mejor película tanto en el Gremio de Productores como en los Oscar) una cinta que despierta grandes amores pero también importantes rechazos sobre todo ante el votante más tradicional al que la propuesta de los Daniels les puede parecer una patochada con ínfulas. Ese es su principal hándicap y más cuando se puede haber evidenciado cierta sensación de hartazgo ante su arrase ante los premios de la crítica y la sobreexposición de un Ke Huy Quan que ha arrasado en premios (salvo el Bafta) pero también abrasado con sus abrazos y achuchones para dejar patente lo feliz que está de que la vida le haya dado esta nueva oportunidad en Hollywood.

“Almas en pena de Inisherin” siempre ha sido nuestra apuesta desde el principio de la carrera pero la cinta de Martin McDonagh nunca ha terminado de apasionar lo que le ha impedido redondear la jugada a pesar de estar presente en todo. Es lo que se ha comprobado con unos Bafta en los que, a pesar de dar la sorpresa con los premios de Barry Keoghan y Kerry Condon que podrían haber supuesto un indicio de una noche triunfal, vio como en cambio se dejaba por el camino los premios de película, dirección y actor. A pesar de que Colin Farrell parecía estar en el año propicio para ser reconocido, tras 20 años de sólida carrera, la competida carrera de mejor actor le deja sólo el Gremio de Actores (SAG) como trampolín hacia el Oscar tras los triunfos de Brendan Fraser en los Critics’Choice y de Austin Butler en los Bafta.

A día de hoy el premio más factible para la película de Martin McDonagh es el de mejor guión original lo que hará que pueda tener posibilidades hasta el final ya que esa categoría ha servido para aupar al triunfo definitivo a cintas como “Spotlight” en 2016 o “Green book” en 2019 en años igual de inciertos que este. Además de todo lo que supondría imponerse en un apartado clave a la que se antoja su máxima rival, la cinta de los Danies. Eso sí, a día de hoy no parece estar clara la posibilidad de que ese apartado vaya unido al interpretativo ya que sus cuatro actores nominados son en estos momentos más posibles alternativas que favoritos reales. "Almas en pena de Inisherin" sigue teniendo la baza de recientes ganadoras de 3 Oscar que consiste en ganar mejor película tras un premio de guión y otro interpretativo.

Realmente el gran beneficiado de este pasado fin de semana (al margen de los Daniels con su premio del DGA y una Cate Blanchett que ha demostrado no haber tenido en ningún momento alternativa a la hora de ser encumbrada con su tercer Oscar) no es otro que Austin Butler que por “Elvis” ya se sitúa como el favorito “de facto” en una categoría muy competida en la que nunca ha terminado de haber una opción que destacara frente a las demás. Es ahora, en la recta final, cuando Butler sólo está a la espera de recibir las aguas bautismales del SAG para confirmar su posición.

Un éxito crítico y de público para "Elvis" que le ha hecho ser una de las películas más en forma durante todos estos meses a lo que ayuda el fenómeno despertado por la cinta, a pesar de que la gente haya perdido el hábito de ir al cine, y ante el hecho de que el biopic musical, y más de una estrella como la del rey del pop, haya sido siempre uno de los platos más apetecibles para los académicos siguiendo el recorrido de "Elvis" unas vibraciones muy parecidas a las de "Bohemian Rhapsody" que se alzó con 4 Oscar (incluido el de mejor actor) en la edición de 2019. A pesar de la exigua carrera de un actor tan joven, que de pequeños papeles ha pasado a un protagonista de tal calibre, Austin Butler ya roza el Oscar por dar vida de manera sobresaliente a alguien tan sujeto a la imitación barata pero tan icónico y trascendental.

En un año en el que no se esperaba a las plataformas (y menos a Netflix) “Sin novedad en el frente” se ha terminado erigiendo como una opción a tener muy en cuenta después de sus 7 premios BAFTA (de 14 nominaciones) y sus 9 nominaciones al Oscar. Un contundente retrato antibelicista que demuestra que la Academia británica está más proclive a Netflix que la de Hollywood ya que allí también ganaron “Roma” en 2019 y “El poder del perro” en 2022.

Su ausencia del Gremio de Productores (PGA) y que Edward Berger (ganador del Bafta) no haya sido nominado al Oscar son unos baches que se antojan determinantes aunque, ante los caprichos del voto preferencial, todo puede pasar todavía con una cinta que ha sorprendido al llegar con semejante potencial en el momento clave de la carrera y teniendo como mejor aval su imponente apartado técnico y lo oportuno de un mensaje en el que vemos a día a día como los hombres siguen continuamente tropezando en lo referente a la guerra en una Historia que no hace más que repetirse. Una apuesta clasicista y de empaque que da fuste al cine bélico conectándolo con lo más hondo de los fantasmas de la condición humana a lo largo de las décadas que, a pesar de haberse quedado fuera de citas importantes, no se sabe si por convencimiento o por no haber llegado a tiempo para consolidar allí su presencia, tiene todos los ingredientes para contar con el fervor académico y más frente a una desbarrada modernez como "Todo a la vez en todas partes". "Sin novedad en el frente", además de ser la cinta no hablada en inglés que ha conseguido más premios en la cita británica, es la primera en ganar el Bafta sin nominación ni a película ni a categorías interpretativas en Globos de Oro, Critics'Choice, Gremio de Productores (PGA) y Gremio de Actores (SAG). 

No hay que olvidar tampoco que “Top Gun: Maverick” puede tener todavía un último aliento desde el punto de vista de la industria. Tom Cruise fue la estrella del almuerzo de nominados de la Academia en calidad de productor de una película que para Steven Spielberg y, según palabras textuales, “ha salvado el culo a la industria del cine en salas”. Es por ello que, ante lo imprevisible de una carrera que todavía no ha terminado de dar vueltas, podría todavía haber un requiebro si la cinta se impusiera en el Gremio de Productores (PGA) lo que desbarataría cualquier predicción en una temporada de premios que se antoja apasionante en esta recta final en la que a pesar de la riqueza de la variedad de las propuestas ha faltado más calidad incontestable y, sobre todo, un mayor apasionamiento en un momento en el que el cine parece cada vez más una opción de nicho para unos pocos "locos" que siguen todavía disfrutando de las experiencias que da la pantalla. El gran inconveniente es que el fenómeno de "Top Gun: Maverick" ha sido muy propio de la cultura usamericana lo que le hace tener poco arraigo en una Academia globalizada.

En todo caso no conviene todavía dar por cerrada una carrera al Oscar que no por verse cercana la meta hace que se tengan las cosas más claras que hace unos meses. Unas opciones se acercan a la estatuilla, otras se alejan, pero existe esa cierta sensación en el ambiente de que todavía pueden ocurrir giros que sean determinantes y que terminen rompiendo más de una quiniela. No está todo dicho y esa es la mejor noticia para una temporada de premios que no pasará a los anales pero que sí que nos está manteniendo en vilo hasta el último momento.

Nacho Gonzalo