Conexión Oscar 2017: Las categorías técnicas

Querido Teo:

Es el momento de repasar las categorías técnicas de los Oscar 2017. Unos apartados que en principio estarían dominados por la película de Damien Chazelle pero que, como ocurrió en los Bafta, podrían virar hacia algún otro nombre que diera emoción a la noche y que redujera el número de estatuillas de “La la land” quedándose lejos del record de 11 estatuillas que parece prácticamente inalcanzable. Sólo habrá que ver lo cerca o no que se queda de ello.

Fotografía

Los candidatos

Bradford Young (La llegada)

A pesar de no estar en “Moonlight”, cinta que ha batido muchos records en los Oscar en lo referente a la raza negra, Bradford Young es el segundo director de fotografía negro nominado al Oscar teniendo como precedente el de Remi Adefarasin por “Elizabeth”. Young consigue su primera candidatura al Oscar tras haber trabajado en cintas como “En un lugar sin ley” (2013), “El año más violento” (2014) o “Selma” (2014). El canadiense contó con él, al estar Roger Deakins ocupado con la nueva película de “Blade Runner”, y Young cumple el reto dentro de esa atmósfera plomiza y desconcertante que refleja el estupor de los humanos ante la inexplicable amenaza alienígena que viene de fuera. Todo entre misticismo y con un punto de ensoñación que ha elevado a la cinta como uno de los clásicos modernos del cine de ciencia ficción. Un trabajo no vistoso pero sin el que la película no se entendería.

Linus Sandgren (La la land)

El director de fotografía habitual de David O. Russell, que siempre ha apostado por una estética afeada en sus películas, logra su primera nominación al Oscar por ese prodigio técnico que es “La la land”. Todo un canto a la vida, a la fantasía y a la cultura artística bien sea en música, cine o pintura como se nos parece querer demostrar en una película de gran belleza plástica en la que cada plano, movimiento, color y coreografía están cuidados al detalle. Sandgren logra dar un carácter uniforme a una cinta que podría haber quedado deslavazada entre números musicales y contribuye a darle ese tono atemporal a pesar de su profundo halo contemporáneo. Planos de ensueño y ensoñaciones perfectamente medidas en una cinta que no necesita de grandes alardes y planos generales prefiriendo optar por lo sencillo, pero muy efectivo, llevándonos a la magia de un planetario, la noche en la que se desata el amor a ritmo de claqué o esas reflexiones de lo que pudo ser y no fue.

Greig Fraser (Lion)

Primera nominación al Oscar para uno de esos directores que mejor ha sabido moverse en los últimos años en atmósferas oscuras o enfermizas. Y es que no hay más que ver su currículum  en el que encontramos a “Mátalos suavemente” (2012), “La noche más oscura” (2012) o “Foxcatcher” (2014). Ha dado la sorpresa en el Gremio de Directores de Fotografía (ASC) y eso le hace ocupar una buena posición de cara a poder hacer lo mismo en los Oscar. En esta ocasión Fraser cambia de registro y llena de luz una cunta que, al contrario de otros de sus trabajos, tiene una gran carga emocional hacia el espectador ante el viaje que emprende el bueno de Saroo. Luminosidad que va desde una India pobre y callejera hasta una Australia metropolitana y urbanita desde donde la tecnología será el principal arma del protagonista para recuperar a su familia.

James Laxton (Moonlight)

Primera nominación para James Laxton que logra en “Moonlight” toda una proeza. Un tono azulado y melancólico inunda a una cinta sobre el despertar vital y sexual de un niño negro débil y de mirada tan tierna como esquiva y triste marcada por la marginación, el desprecio, una familia desestructurada y el acoso escolar en un entorno impregnado de violencia y narcotráfico. Una fotografía que sirve de vehículo para una película tan bella y lírica como dolorosa y terrenal mostrando como la sociedad que nos rodea nos construye coartando en ocasiones el verdadero “yo”. Evidentemente las referencias al cine de Wong Kar Wai o Terence Davies se dan cita tanto en el cuidado de su imagen como en la luminosidad teatral de las mismas; todo manteniendo la coherencia a lo largo de los tres actos de la película que también nos adentran en la psicología y la evolución de este chico carne de cañón.

Rodrigo Prieto (Silencio)

Rodrigo Prieto ha salvado el honor de “Silencio”, una de las grandes apuestas para los Oscar de este año que ha visto como se ha tenido que contentar con esta candidatura cuando aspiraba a mucho más. Para Prieto es su segunda candidatura tras la cosechada por “Brokeback Mountain” en 2006 y durante este tiempo se ha encargado de títulos como “Babel”, “Argo” o “El lobo de Wall Street”. Ahora inunda de misticismo la película más arriesgada e introspectiva de Scorsese teniendo en cuenta el gran bagaje filosófico y religioso que encierra. Los frescos visuales propios de la cultura oriental quedan presentes en un trabajo de tonos sepias y en los que las luces de las velas incluso invaden de cierto tono fantasmagórico a la película sobre la búsqueda de la fe y también sobre los motivos que llevan a cuestionarla. Un trabajo de empaque y de gran maestro que, aunque haya sido un fiasco, es todo un deleite para los sentidos aunque su ritmo y su temática pidan un gran esfuerzo para el espectador más en un trabajo en el que Scorsese parece haberse querido poner en paz con Dios y su fe aunque eso haya supuesto en esta ocasión abandonar a ese público que ha convertido sus trabajos anteriores en películas muy rentables en taquilla.

El dictamen

Ganará: Linus Sandgren (La la land)
Alternativa: Greig Fraser (Lion)
Quiero que gane: Linus Sandgren (La la land)
Echo de menos: Seamus McGarvey (Animales nocturnos)

Montaje

Los candidatos

Joe Walker (La llegada)

Segunda nominación para Joe Walker tras la conseguida en 2014 por “12 años de esclavitud”. Precisamente fue con el británico Steve McQueen con el que comenzó a despuntar (desde “Hunger” en 2008 y pasando por “Shame” en 2011) pero ha sido el canadiense Denis Villeneuve el que le ha convertido en su montador de referencia desde “Sicario” y volverá a contar con él en la secuela de “Blade Runner”. La estructura de la película permite saltos en el tiempo y planteamientos filosóficos en la que la labor del montador ha tenido que ir muy pegada a la inherente música de Jóhann Jóhannson que termina siendo los poros emocionales de la cinta. Un trabajo arriesgado que Walker ha resuelto sin aparente esfuerzo.

John Gilbert (Hasta el último hombre)

No deja de ser comprensible la nominación para John Gilbert que vuelve a los Oscar tras su solitaria nominación por “El señor de los anillos: La comunidad del anillo” en 2002. La vigorosidad es algo que se premia en esta categoría y eso no le falta al director australiano con más testosterona. Tras una primera hora clasicista, que conecta con el Clint Eastwood más íntimo, la cinta termina derivando en una de las manifestaciones bélicas mejor narradas y más veraces y viscerales que hemos visto en el cine reciente en pleno campo de batalla de la II Guerra Mundial. Un trabajo que va a más y que podría dar la sorpresa en la categoría si tenemos en cuenta que Gilbert ha ganado el Bafta por este trabajo.

Jake Roberts (Comanchería)

Primera nominación al Oscar para Jake Roberts; habitual del cine de David Mackenzie y que el año pasado pudo quedarse cerca de la nominación por la clasicista y romántica “Brooklyn”. “Comanchería” es una cinta metafórica que sirve para hacer analogía de un tiempo que nos ha tocado vivir en el que los valores son lo de menos y en el que se nos obliga a sobrevivir y sacar la cabeza para no morir ahogados. Cine rebelde, furioso y vigoroso frente a la indignación de los perdedores y que se agarran al populismo o al revanchismo para salir adelante en la huida de dos hermanos que son vistos más como un par de justicieros a lo Robin Hood que como dos criminales; algo a lo que contribuyen Jake Roberts en el montaje, David Mackenzie a la dirección y Taylor Sheridan al guión construyendo una de las mejores películas del año imprimiendo intensidad, ambientación y mensaje. Un ejemplo de como el montaje puede acuñar ritmo y dinamismo a una película crepuscular casi como fuera un thriller setentero.

Tom Cross (La la land)

Tom Cross aspira a repetir la estatuilla conseguida en 2015 por “Whiplash” y, aunque es verdad que la intensidad de aquella es difícil de ser vista en cualquier otra cinta, Cross tiene esa habilidad para saber perfectamente lo que su director quiere y lograr que el espectador se quede absorto en la pantalla. No tiene por qué basarse en grandes coreografías ni números (abusando más de planos cortos que largos) pero el ritmo de una película que combina el drama, la comedia, el romance y la capacidad de fabular con algunos momentos como la canción de John Legend o el tan comentado final hacen a la película merecedor del premio, más cuando las cintas musicales suelen tener cierta ventaja para hacerse con este Oscar.

Nat Sanders y Joi McMillon (Moonlight)

Es la mirada común de los tres actores que dan vida a Chiron la que une los tres capítulos en los que se divide “Moonlight”. Es la primera nominación para este tándem de montadores y es que, aunque el primero tiene ya algunos títulos destacados dentro del cine “indie”, para McMillon es su primer largometraje tras un recorrido en el mundo de los cortos siendo la primera montadora negra en ser candidata al Oscar. Como hemos comentado, el gran acierto de la película es que esos tres momentos de una vida confluyan en uno solo a la hora de definir la personalidad de su protagonista. Se puede decir que lo han conseguido gracias a un montaje más sensorial y vertebrado que vibrante y rítmico.

El dictamen

Ganará: Tom Cross (La la land)
Alternativa: John Gilbert (Hasta el último hombre)
Quiero que gane: Tom Cross (La la land)
Echo de menos: Alexandre de Franceschi (Lion)

Diseño de producción

Los candidatos

Patrice Vermette y Paul Hotte (La llegada)

Es la segunda nominación al Oscar para Patrice Vermette (“La reina Victoria” en 2010) y la primera para Paul Hotte. “La llegada” es un puñetazo en la mesa de Villeneuve a películas como “Interstellar” que han intentado contar algo parecido con cánones más obvios y rutinarios. Una combinación perfecta de lo que puede ser el cine espectacular de Hollywood pasado por el tamiz de un maestro en lo suyo, con la personalidad requerida para que siempre prevalezca su sello de autor a las concesiones palomiteras tan deseosos como están los Estudios, además de sacar dinero, de que les saquen directores así de cierto aborregamiento. A ello contribuye una ambientación entre salas militares y campos abiertos que reflejan bien la tensión de una humanidad teóricamente tan en peligro como confusa ante los tiempos que vive.

Stuart Craig y Anna Pinnock (Animales fantásticos y dónde encontrarlos)

Stuart Craig ya es todo un veterano en este apartado con 3 Oscar (“Gandhi” en 1983, “Las amistades peligrosas” en 1989 y “El paciente inglés” en 1997) mientras que Anna Pinnock ganó la estatuilla en 2015 por “El Gran Hotel Budapest”. El gran trabajo de este tándem era dar coherencia al universo Rowling en esta transición de franquicia a franquicia ya que parece que estamos sólo ante el inicio de una saga de cinco películas recuperando la esencia del cine familiar pero sin abandonar un mensaje crítico y de tolerancia hacia el diferente en una Usamérica proindustrial y segregada. Aunque tenga algunos momentos en el que reina cierto caos técnico y alguna concesión argumental poco justificada, la película es una gozada por esa recuperación de la fantasía familiar y su acertada reconstrucción de la época con un Nueva York que luce de manera exquisita en la pantalla.

Jess Gonchor y Nancy Haigh (¡Ave, César!)

Es la segunda nominación para Jess Gonchor (“Valor de ley” en 2011) y el segundo intento de Oscar para una habitual de los Coen como Nancy Haigh (ganadora de la estatuilla por “Bugsy” en 1992). Siempre funciona bien el subgénero meta de cine dentro del cine construyendo aquí una farsa sobre la industria de Hollywood de los años 50 con un argumento mínimo sólo vertebrado por el supuesto secuestro de una estrella encasillada en películas de romanos. Eso permite que se reconstruya la magia del Hollywood clásico entre platos de grandes Estudios y divinidades de estrellas. Lucimiento a tutiplén para una película irregular pero que se gana con merecimiento esta candidatura.

David Wasco y Sandy Reynolds-Wasco (La la land)

Primera nominación para este tándem habitual del cine de Tarantino. Ellos logran que cobre sentido esa frase tan manida y cursi de “querer quedarse a vivir en una película”. El gusto en cada detalle y momento que nos lleva desde un planetario o salas de música a paseos por un Los Angeles idealizado que prescinde de lo bullicioso para convertirlo en un lugar en el que el amor y las pasiones son lo que importa en una ciudad de las estrellas que también abraza lo contemporáneo y lo clásico de una manera tan orgánica como la dualidad que fluye en la cabeza de Ryan Gosling frente al puritanismo del respeto a la tradición y la necesidad de abrazar los nuevos tiempos.

Guy Hendrix Dyas y Gene Serdena (Passengers)

Segunda nominación al Oscar para Guy Hendrix Dyas (“Origen” en 2011) y también segunda para Gene Serdena (“Her” en 2014). Un trabajo que ha quedado por encima del semifiasco de la cinta que al menos de cara a los Oscar sí que ha valorado sus puntos fuertes. Entre ellos, además del carisma que puedan transmitir Chris Pratt y Jennifer Lawrence obligados a vivir juntos 90 años en el espacio, plasma bien esa soledad del hombre y la paranoia que en esas circunstancias se provoca como vimos en “Moon” o “Marte”; así como el egoísmo en el que basa su supervivencia. Lo mejor son algunos guiños a Kubrick que van desde ese barman robotizado hasta la estética de “2001: Una odisea del espacio” a otros clásicos como “Alien, el octavo pasajero”.

El dictamen

Ganará: David Wasco y Sandy Reynolds-Wasco (La la land)
Alternativa: Stuart Craig y Anna Pinnock (Animales fantásticos y dónde encontrarlos)
Quiero que gane: David Wasco y Sandy Reynolds-Wasco (La la land)
Echo de menos: Jeremy Woolsey y Missy Parker (Figuras ocultas)

Vestuario

Los candidatos

Joanna Johnston (Aliados)

La veterana Joanna Johnston alcanza su segunda nominación al Oscar (“Lincoln” en 2013) tras tres décadas de trabajo incesante para directores como Steven Spielberg o Robert Zemeckis. Precisamente es con este último para el que ha rodado esta particular versión de “Casablanca” que ha sido maltratada por crítica y público, a pesar de contar con el reclamo de dos estrellas como Brad Pitt y Marion Cotillard, pero que algunos reivindican como cinta que crecerá con el tiempo. Vestidos glamurosos, uniformes militares y trajes de gala para un trabajo cuidado y exquisito que rememora grandes páginas del cine clásico de los 40.

Colleen Atwood (Animales fantásticos y dónde encontrarlos)

Colleen Atwood es la gran maestra actual de este campo junto a Sandy Powell alcanzando ya su 12ª nominación entre las que ha habido 3 Oscar por “Chicago” en 2003, “Memorias de una geisha” en 2016 y “Alicia en el país de las maravillas” en 2011. Estamos ante el trabajo menos centrado en unos personajes concretos y el que ha precisado de más fondo de armario para ambientarse en ese Nueva York de distintos estratos sociales marcados por la inmigración y los ministerios de magia. Un trabajo, como siempre en su caso, sobresaliente pero que no ha llamado tanto la atención como otras apuestas.

Consolata Boyle (Florence Foster Jenkins)

Segunda nominación para Consolata Boyle, también por una película de Stephen Frears tras “The Queen” en 2007. Aquí vuelve a centrarse en un personaje femenino como la considerada peor soprano de todos los tiempos. Una mujer enferma de sífilis desde los 18 años pero que en su madurez, y aprovechando de su capital económico y de la perseverancia y devoción con la que trabaja para ella su segundo marido, un discreto monologuista y actor de teatro que vive de ella pero más como un fiel y devoto  compañero que como un parásito sacacuartos, está decidida a dar un paso más allá de su afición a la ópera y ese no es otro que el llenar los teatros como una gran soprano; especialmente el Carnegie Hall de Nueva York. Una especie de adaptación en el mundo operístico y real (volvemos a recordar que no deja de ser llamativo que todo lo que cuenta la película sucedió y sus grabaciones y apariciones se convirtieran en un éxito e incluso en una bandera de ánimo para los soldados que combatían en la guerra) de “El traje nuevo del emperador” ante el séquito que no hace más que animarla y a contribuir a cumplir su empeño con suma hipocresía y risa floja. Eso provoca que Boyle se haya lucido entre indumentarias barrocas y ornamentales, con plumas y acolchados para hacer más robusta a la actriz, para representar los personajes operísticos de la cantante y también una personalidad marcada por la pasión, la ostentación, el esfuerzo, la inocencia y la vulnerabilidad.

Madeline Fontaine (Jackie)

Habitual del cine de Jean-Pierre Jeunet, Fontaine consigue su primera nominación al Oscar por mostrar el duelo a través de los vestidos de una Jackie Kennedy que fue icono de glamour y clase. Desde su característico vestido rojo, el rosa palo y el luto tanto dentro como fuera de ella representado en ese traje con velo negro. Quizás no es el trabajo más ambicioso de los nominados pero sí que el mejor retrata una época y también una personalidad que se somete a examen caleidoscópico en esta cinta.

Mary Zophres (La la land)

Es uno de los premios más disputados para la película ya que, si bien podría caer en su haber, sobre todo por esos trajes y vestidos atemporales tan vintage como propios de nuestro tiempo, que provocan que nunca desentonen con la estética y que convierten a la película como válida para cualquier época aunque, en teoría, se desarrolle en la actualidad, también podría ser para cualquier otra cinta. Es la segunda nominación para Mary Zophres tras “Valor de ley” y su gran acierto es darle todas las armas a Emma Stone para pasar de la vulnerabilidad de una joven aspirante a actriz a poder lucirse como la mejor de las estrellas mientras que a Ryan Gosling le dota de ese aire de gentleman bohemio heredero de los clásicos.

El dictamen

Ganará: Madeline Fontaine (Jackie)
Alternativa: Mary Zophres (La la land)
Quiero que gane: Mary Zophres (La la land)
Echo de menos: Mary Zophres (¡Ave, César!)

Maquillaje y peluquería

Los candidatos

Eva von Bahr y Love Larson (Un hombre llamado Ove)

Esta pareja sueca consigue la nominación por segundo año consecutivo tras “El abuelo que saltó por la ventana y se largó”. Con un trabajo muchos menos vistoso ha logrado, no obstante, pasar por delante de muchas producciones que han puesto más dólares en ello. Todo se centra en el trabajo que se ha hecho con el actor Rolf Lassgard para convertirlo en el cascarrabias Ove.

Joel Harlow y Richard Alonzo (Star Trek: Más allá)

Joel Harlow ya consiguió este Oscar en 2010 por “Star Trek” y Richard Alonzo se hace con su primera nominación. Es el trabajo desempeñado en los actores Sofia Boutella e Idris Elba el que justifica la candidatura y da posibilidades a la película.

Alessandro Bertolazzi, Giorgio Gregorini y Christopher Nelson (Escuadrón Suicida)

La Academia sigue albergando en esta categoría películas con malas críticas pero que destacan en este trabajo. Es lo que ha permitido una nominación a la cinta de David Ayer. El hecho de superar la criba da a la cinta todas las posibilidades teniendo en cuenta lo que supone trabajar con ese grupo de justicieros reclutados del averno del mal entre los que se llevan la palma Harley Quinn y el Joker. Es la primera nominación para este trío de candidatos.

El dictamen

Ganará: Escuadrón Suicida
Alternativa: Star Trek: Más allá
Quiero que gane: Escuadrón Suicida
Echo de menos: Florence Foster Jenkins

Sonido

Los candidatos

Bernard Gariépy Strobl y Claude La Haye (La llegada)
Kevin O’Connell, Andy Wright, Robert Mackenzie y Peter Grace (Hasta el último hombre)
Andy Nelson, Ai-Ling Lee y Steve A. Morrow (La la land)
David Parker, Christopher Scarabosio y Stuart Wilson (Rogue one: Una historia de Star Wars)
Greg P. Russell, Gary Summers, Jeffrey J. Haboush y Mac Ruth (13 horas: Los soldados secretos de Bengasi)

El corazón de muchos está con Greg P. Russell (17 nominaciones) y Kevin O´Connell (21 nominaciones) pero parece que seguirán con esa mala racha. El favorito es el trío de “La la land” funcionándole muy bien al género del musical en esta categoría. En este apartado ganaron “Chicago”, “Ray”, “Dreamgirls”, “Los miserables” y “Whiplash”.

El dictamen

Ganará: La la land
Alternativa: La llegada
Quiero que gane: La la land
Echo de menos: Comanchería

Montaje de sonido

Los candidatos

Sylvain Bellemare (La llegada)
Wylie Stateman y Renée Tondelli (Marea negra)
Robert Mackenzie y Andy Wright (Hasta el último hombre)
Ai-Ling Lee y Mildred Iatrou Morgan (La la land)
Alan Robert Murray y Bub Asman (Sully)

La principal diferencia de este apartado con el anterior es que el montaje de sonido se basa en la creación de sonidos artificiales que se añaden en postproducción. Aunque la presencia aquí de “La la land” posibilitó que se igualara el record de 14 nominaciones de “Eva al desnudo” y “Titanic”, la bélica “Hasta el último hombre” parte como favorita junto a “La llegada” tanto por género la primera como por importancia del sonido y la música en la segunda.

El dictamen

Ganará: La llegada
Alternativa: Hasta el último hombre
Quiero que gane: La llegada
Echo de menos: Comanchería

Efectos visuales

Los candidatos

Craig Hammack, Jason Snell, Jason Billington y Burt Dalton (Marea negra)
Stephane Ceretti, Richard Bluff, Vincent Cirelli y Paul Corbould (Doctor Strange)
Robert Legato, Adam Valdez, Andrew R. Jones y Dan Lemmon (El libro de la selva)
Steve Emerson, Oliver Jones, Brian McLean y Brad Schiff (Kubo y las dos cuerdas mágicas)
John Knoll, Mohen Leo, Hal Hickel y Neil Corbould (Rogue one: Una historia de Star Wars)

El premio parece sin discusión para “El libro de la selva” al ser el CGI clave para la película y haber superado tirarse a la piscina en tirabuzón y que todos temieran cierto descalabro con ello. Finalmente, Disney consiguió un éxito certificando que se va a explotar al máximo las adaptaciones en acción real de sus clásicos animados. Como alternativa el hecho de tener a una película de animación por segunda vez en la Historia como nominada en este apartado.

El dictamen

Ganará: El libro de la selva
Alternativa: Kubo y las dos cuerdas mágicas
Quiero que gane: El libro de la selva
Echo de menos: Animales fantásticos y dónde encontrarlos

Nacho Gonzalo