Cine en serie: "El nido", el debate sobre la gestación subrogada
Querido Teo:
Italia, España, Francia, Alemania, Irlanda, Países Bajos, Bélgica y la República Checa impiden todas las formas de gestación subrogada. Portugal lo permite sólo para parejas heterosexuales con necesidades médicas, y tiene que ser sin pagar, altruista. En Reino Unido es legal, también altruista pero exclusivamente para sus ciudadanos. En "El nido" la BBC dedica sus cinco capítulos a contarnos un caso que muestra la complejidad del asunto, comenzando con lo esencial que es la paternidad para algunas personas, dispuestas a llegar muy lejos.
Reconoceréis a Sophie Rundle de "Peaky Blinders" o de "Gentleman Jack", y a Martin Compston de la estupenda "Line of duty", apoyados por la excelente producción que acostumbra BBC. En pocas palabras, hay otro precio a pagar cuando quieres comprar con dinero todo aquello que deseas.
Dave y Emily han conseguido fertilizar sus óvulos en una clínica de Europa del Este, pero no habrá opción a más, y desde el comienzo sabemos que la madre de alquiler a la que habían contratado lo ha perdido durante el embarazo. Tan sólo les queda uno. Deciden aceptar la propuesta de una joven a la que conocieron por casualidad. Tiene la edad precisa, 18 años, depende de los servicios sociales y oculta legalmente un pasado oscuro que ha condicionado su vida.
Dave y Emily han recurrido a Ucrania, que, junto a Rusia, tiene las leyes más laxas de Europa en maternidad subrogada, lo que permite a cualquiera, incluidos los extranjeros, pagar a una madre de alquiler por sus servicios los 40.000 euros que cuesta, y fuera de Europa, Kenia funciona sin regulación y por unos 35.000 euros se consigue vientre de alquiler. 100.000 euros se pagan ahora en Estados Unidos.
Serie seria, que une a su trama de investigación eficaz, mucha comprensión por la situación de todos los personajes.
Carlos López-Tapia