"600 millas"
(3 votos, media: 3,33 de 5)
Cargando...
La web oficial.
El argumento: Arnulfo Rubio es un joven de Sinaloa que está implicado en el tráfico de armas de Estados Unidos a México. Por su parte, Hank Harris, un veterano agente de la ATF, lo vigila desde el otro lado de la frontera. Un incidente mínimo hace que los dos entren en contacto y vayan juntos a un lugar muy peligroso. Aunque son enemigos, durante el largo viaje se darán cuenta de que quizá el único modo de salvarse será confiar el uno en el otro.
No conviene ver: “600 millas” es una seca historia sobre el tráfico de armas con escaso nervio a pesar de alguna escena potente por su suciedad y aspereza en el enfrentamiento físico, intelectual y de poder de estos dos polos opuestos en este drama de tráfico de armas fronterizo. Una cinta más hablada en inglés que en mexicano, concesión para un sobrio Tim Roth que aborda con sobriedad el papel de agente secuestrado por un joven delincuente y que protagoniza con él una road movie hacia ninguna parte. Escaso ritmo que convierte a la cinta en un producto tedioso y poco afortunado. Violencia seca y deshumanizada, siempre latente como un polvorín pero que no logra enganchar como debiera. Una ópera prima alabada por sus muchas capas sobre la profundidad del individuo de nuestro tiempo en un entorno de desesperación y violencia pero de la que lamentablemente no podemos destacar excesivos valores más allá de una duración que, a pesar de no llegar a la hora y media, convierte su visionado en una experiencia poco accesible.
Conviene saber: Trabajo del director Gabriel Ripstein que logró ser la representante de México para el Oscar 2016. Mejor ópera prima en el Festival de Berlín 2015 y participante en la sección Horizontes Latinos del Festival de San Sebastián 2015.
La crítica le da un TRES
Choca su presencia y hasta reconocimiento en festivales de cine con las malas críticas recogidas en varios de los medios que consulto. Alguno, eso sí, que presumo partícipe en su producción y/o interesado en su distribución, es todo elogios.
Lo suyo seria pagar la entrada y juzgar uno mismo.
Pero es que ya me está cansando la mediocridad de la cartelera. Hasta lo que la media de la crítica puntúa como pasable (6/7 en vuestro caso, imagino) me resulta decepcionante desde hace muchos meses. Tanto que estoy por replantearme acudir casi cada semana una o dos veces al cine. ¡Se estrena gran número de películas! ¡Pero que malas me parecen!