La
web oficial nos obliga a pinchar en el punto de mira con el que nos apunta el protagonista. Trailer y estética de videojuego para acceder a los distintos apartados de la web. Difícil no terminar con dolor de cabeza.
El argumento: Nos situamos en un futuro próximo, donde juego y espectáculo están envueltos en un híbrido aterrador. Humanos controlados por humanos a gran escala, juegos en red donde personas representan a personas para siempre. La Tecnología del control mental se ha extendido y el corazón de ese controvertido juego es su creador, el multimillonario Ken Castle. Su última creación, Slayers es un juego de disparo en primera persona, que permite proyectar las fantasías más salvajes de cada uno ante un público global, utilizando prisioneros reales como avatares que luchan contra la muerte.
Kable es la superestrella y héroe de culto del ultra violento Slayers. Es controlado por Simon, un joven jugador con estatus de estrella de rock, que cada semana lucha contra las adversidades consiguiendo llevar a Kable a la victoria.
Arrebatado a su familia, encarcelado y forzado a luchar contra su futuro, este gladiador del futuro, deberá sobrevivir lo suficiente para escapar del juego, liberar a su familia, recuperar su identidad y salvar a la humanidad de la despiadada tecnología de Castle.
No conviene ver: Trama futurista de acción planteada como un videojuego pero que no llega a tener ningún aliciente para echarse al estómago. La ambientación suena a pobre y falsa y si Gerard Butler cumple como chico duro choca ver a un Michael C.Hall más desatado como malo después de verle en “Dexter” jugar tanto con una fina línea entre asesino y héroe moral.
Conviene saber: El tandem de directores todavía tiene poco recorrido en la realización. Hasta ahora sólo habían presentado las dos partes de “Crank”.
La crítica le da un TRES