Asco de cine: "Algo pasa con Mary", o la masturbación preventiva

Querido diario:

Me acaba de excitar un video sobre billar a tres bandas. Ya se que es la edad. El sexo es la forma más refinada que tiene la naturaleza para torturar adolescentes. La masturbación es la alternativa menos psicótica, aunque no suele ser tampoco un paseo. Busco en mis apuntes una vieja historia contada por Billy Wilder de un amiguete descubierto por su padre mientras estaba masturbándose. Me impresionó porque el padre le dijo que moriría si lo hacía cincuenta veces más. Debía ser contable además de algo sádico. El pobre chico paró un par de días por terror, pero la madrastra Naturaleza es capaz de hacer creer a sus hijos que hay cosas por las que vale la pena morir, y el chico no pudo evitar seguir dándole al gusto. Era tan fácil y barato el placer que hasta le pareció razonable que tuviera alguna consecuencia, porque de no ser por eso –pensaba con una lógica aplastante-, todo el mundo andaría haciéndose pajas, y sería algo natural. Era demasiado ingénuo para no pensar que se las hacían sin que él lo viera. Pero ya sabía contar porque anotó a partir de entonces cada masturbación. Aguantaba hasta no poder más, una semana como mucho! hasta que dejó atrás la 49.

Según Wilder: «Escribió una nota de despedida para sus padres en la que explicaba que había resistido hasta el límite de sus fuerzas. Pero no podía más y pedía perdón por la paja cincuenta que acabaría con su vida. Alcanzó el orgasmo en una mezcla de placer y angústia. Luego esperó la muerte. Y horas más tarde la que murió fue su fe en el padre: «Y a partir de entonces, no volvió a creerse una sola palabra de lo que le dijera".

Con la masturbación las chicas son distintas, como en todo el resto, pero aunque la naturaleza suela ser menos exigente con ellas, los reprimidos lo son todavía más. Arthur Miller recordaba en un artículo como, en 1962, cuando los censores religiosos vieron el preestreno de la película "Vidas rebeldes", cuyo guión era suyo, "!expresaron un gran desagrado ante la escena en que Marilyn Monroe, presa de la desesperación y la frustración y, por cierto, totalmente vestida, sale de una casa y abraza el tronco de un árbol. Muy serios, dijeron que en esa escena se mostraba una masturbación, y que si no se eliminaba, clasificarían la película como inmoral y gran parte del público no podría verla. Una vez más, hubo que negarse a aceptar el criterio de un censor, pero no habría tenido ese privilegio de haber vivido en otro país. Las experiencias de esta índole me han ayudado a combatir la censura."

La situación ha mejorado tanto en Occidente como para jugar con una eyaculación descontrolada y que buena parte de La Clínica se ría,y otra buena parte lo disimule.
Y esto al margen de las cualidades evidentes del semen en la cosmética. Si tienes dudas dale un repaso a la serie "A golpe de bisturí", además de ver y escuchar este mp3!.
AlgopasaconMary.mp3

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