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Querido diario:
Me he levantado solo. Entiéndeme, no es que me acostara ayer con ciento y la madre y se hubieran pirado todos porque ronco. No es eso. Es esa sensación de soledad que tenemos los humanos cuando el desamor te pega en la nuca un zapatazo. Hace mucho que no se nada de mi "ex" y no termino de encontrar una "in" que me tranquilice la neurona. Tu eres un diario, y todo te da igual, pero esta sensación ha servido para muchos argumentos cinematográficos. Se podría resumir en un diálogo que sería:
- No cuentes con nadie más que contigo mismo y la vida se mostrará a veces generosa.
En estos momentos la vida debe de haber salido a hacer algo porque de generosa más bien poco. Cuando vuelva seré directo, le voy a pedir una chica mucho más mayor que yo. Yo sabría apreciar su experiencia y ella podría valorar mi saber gastronómico y una capacidad sexual ilimitada, junto a una inexperiencia tan gigantesca que tendría mucho terreno donde trabajar. Creo que haríamos una buena pareja.
El cine está lleno de casos como el mío. Mujeres maduras que encuentran interesante la inmadurez. Tengo catorce, o sea que puedo aguantar bien hasta una vieja de 40sin que se me mueva un músculo. Con esas edades las chicas sabrán aguantar a un tipo como yo, con cambios de humor muy rápidos, aficiones desmedidas y hábitos alimenticios raros.
Me he comido este mp3 donde se habla precisamente de esto….
Mujeresmaduras.mp3
Le he contado al "Venas" lo que me pasa y me ha pasado tres antidepresivos, un Play-Boy, y un balón de fútbol americano. Es mi mejor amigo… queda todo dicho. Voy a enchufar el electroshock ahora mismo….
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