Conexión Oscar 2017: "Moonlight", "Sully" y "Una" debutan en el Festival de Telluride
Querido Teo:
El primer fin de semana de Septiembre en la recóndita y montañera Telluride en Colorado se muestra casi de tapadillo (aunque la atención mediática allí es cada vez mayor) una especie de aperitivo del Festival de Toronto que arranca siempre unos días después. En esta ocasión ha servido para confirmar que "La la land" (tras Venecia) y "Manchester by the sea" (tras Sundance) son las películas con más potencial de Oscar por el momento, siendo también el lugar en el que se han visto por primera vez “Moonlight”, “Sully” y “Una” tres películas que, en mayor o menor medida, pueden estar presentes en la carrera.
"Moonlight" va dirigida a ser el fenómeno crítico de la temporada y, a nivel de Oscar, aspira a ser la primera que le dé la victoria a A24 Films y también que, en cierta manera, sirva para cumplir tres deudas en una. La primera la del tema racial en un año en el que se agolpan un buen puñado de títulos con la causa negra como hilo conductor y la segunda para hacer justicia a “Brokeback Mountain” y “Boyhood” por sus derrotas en anteriores años a pesar de llegar como favoritas. Eso no es baladí teniendo en cuenta que la cinta de Barry Jenkins no hace más que recibir comparaciones con esas cintas. Primero por tratar el tema del despertar homosexual del protagonista en un entorno marcado por el rechazo y el prejuicio y segundo por utilizar a tres actores que dan vida al personaje protagonista en la niñez, en la adolescencia y en la juventud adulta. Una cinta de la que se alaba su enorme sensibilidad y sutilidad a la hora de abordar una historia cotidiana pero que atesora amplias lecturas entre el descubrimiento de uno mismo y la rabia interna ahondando en la poesía pero sin hacerla superficial. Tres actores que lo dan todo y que casan entre sí a la hora de mostrar la evolución física y psíquica del joven Chiron gozando también de una serie de secundarios de los que la película nunca se olvida y a los que brinda momentos de lucimiento. Aunque no se me quita la idea de que la película finalmente se quede en el circuito independiente y su techo sean los Independent Spirit Awards, todo parece indicar que la película (que prácticamente ha surgido de la nada) seguirá emocionando y convenciendo a lo largo de la carrera. Lo dicho, la Academia podría encontrar en una misma carta la posibilidad de quitarse de un plumazo varios fantasmas que sus detractores le achacan.
"Sully" de Clint Eastwood también ha asomado por Telluride y el primer triunfo es de Tom Hanks que parece haber logrado al fin que ningún compañero de reparto le coma la tostada (a lo Barkhad Abdi o Mark Rylance). Es decir, si este año se queda sin nominación (parece que le ocurrirá una vez más) no será otro compañero suyo el que brille como secundario. La cinta del octogenario Eastwood ha sido reconocida como un drama eficaz pero que no llega a los niveles de las grandes películas del director. Warner (al margen de lo que ocurra a nivel de candidaturas) parece que tiene aquí un caso muy parecido al de “El francotirador”; una cinta que no será especialmente recordada pero que sí que funcionará muy bien en taquilla gracias a su temática (la heroicidad del piloto que salvó a la tripulación de su avión aterrizando en el mismísimo río Hudson) y al reclamo de Hanks que, a pesar de las sombras que se sacaron poco después al piloto real, encaja como nadie en el papel de héroe anónimo. Una película impecablemente realizada, destacándose la fotografía de Tom Stern y los efectos visuales, en una intensa y enérgica hora y media de película sostenida por la solidez actoral de Hanks (conmovedor como héroe por accidente y como americano medio) con escenas como las desarrolladas en el avión de gran proeza técnica al estilo de lo que hizo Robert Zemeckis en “El vuelo”. Aaron Eckhart como eficaz y leal copiloto y Laura Linney como abnegada y sufridora mujer de Hanks no llegan al nivel de ser considerados para tener presencia en la carrera.
"Una" es el rebautismo de “Blackbird”, adaptación de la obra de teatro de David Harrower que se centra en un tormentoso reencuentro protagonizado por Ray y Una, quince años después de que él fuera acusado de haberla violado cuando ella sólo tenía 15 años destapando los remordimientos y los fantasmas del pasado. Jeff Daniels y Michelle Williams consiguieron la nominación al Tony por este texto y ahora llega el turno de Rooney Mara y Ben Mendelsohn, confirmándose que la cinta (de tener alguna opción) la tiene en el trabajo de los dos actores. Un drama intenso y provocador en un partido de ping-pong cinematográfico entre el dolor interior marcado por la obsesión de ella y el carisma y arrepentimiento de él. Además del trabajo de los actores se alaba el estilo y oficio que muestra a pesar de estar dirigida por un debutante (Benedict Andrews) y también la fotografía del habitual de Yorgos Lanthimos, Thimios Bakatakis. Referentes como “Hard Candy” han sido mencionados en las críticas.
Nacho Gonzalo
Tom Hanks ha generado muchas dudas por Sully muchos ven una nominación por su papel como el piloto Chesley Sullenberger (Me icluyo no puedo decir que veo una nominación pero si un fuerte candidato para este año)Aaron Eckhart no creo que se daba dar por sentado que no llega al nivel de ser considerados para tener presencia en la carrera.
Una tiene dos grandes potencias Mara y Mendelsohn pero jugamos a la expectativa al no tener algún trailer que nos permita perfilarlos dentro de la carrera con mayor fuerza.
Moonlight esta en el filo de un barranco, Puede ser una película amada por la academia o despreciada totalmente y solo quedarse en los circuitos independiente donde su mayor acogida solo llegue Independent Spirit Awards, tendremos que esperar el valor que le da la critica a la película y como se porta la temporada con ella para poderla perfilar con mayor seguridad.