Espresso: Los robaescenas del trailer de “Star Wars VII”, la mala audición de Eddie Redmayne, Lars Von Trier deja las drogas y Shia LaBeouf violado
Querido Teo:
* El trailer de “Star Wars: El despertar de la fuerza” es absoluto protagonista en los foros de opinión cinéfilos. Algunos ya se han mojado sólo con ver el Halcón Milenario y escuchar la característica fanfarria galáctica de John Williams, mientras que otros (sobre todo los que a esta saga les interesa bien poco y no se dejan llevar por la nostalgia) no comprenden que hay de interesante en un trailer que tampoco es que muestre mucho más allá del hype que supone el acontecimiento de la vuelta de la saga de George Lucas ahora renovada por J.J. Abrams. Pero, eso sí, lo que ya se puede decir es que ya tenemos robaescenas que no es otro que esta especie de R2D2 y balón de fútbol que corretea por el desierto durante el trailer. También ha generado comentarios y parodias el sable multilaser y esa especie de vehículo motor al que se sube Daisy Ridley y que nos recuerda a un helado magnum. Por lo demás, poco más que el hecho de ver algo más a por donde pueden ir los personajes de Oscar Isaac y John Boyega y, por supuesto, la aparición de un Halcón Milenario que ha estado en el taller demasiado tiempo.
* El que al final no está en la película de J.J. Abrams no es otro que Eddie Redmayne, uno de los potenciales favoritos al Oscar gracias a su papel en “La teoría del todo”. En una entrevista para un programa de radio ha confesado que tuvo una audición para uno de los papeles pero que el resultado fue catastrófico. "Como directora de casting estaba la maravillosa Nina Gold, a la que adoro. Fui e hice mi escena, y después de estar intentando actuar en más de siete ocasiones... ella estaba como '¿no tienes nada más Eddie?' y yo le dije 'quiero irme'. Ella contestó, 'creo que los dos vamos a estar de acuerdo en lo mismo' y yo le respondí, ‘Ok, mi sueño de la infancia machacado’". La demostración de que uno de los actores de moda tampoco es infalible y que, como estrella humanizada, los nervios también pueden hacernos jugar a todos una mala pasada.
* Lars Von Trier ha confesado dejar definitivamente las drogas y el alcohol. Él se hace la misma pregunta que nosotros. ¿Cómo afectará esto a sus películas? Parece que podría ser de una manera definitiva ya que no tener a un Von Trier hasta arriba de sustancias podría provocar que su compleja personalidad y talento se difuminaran y que incluso diera carpetazo a su carrera. Hasta ahora se metía entre pecho y espalda todos los días un cóctel formado por vodka y una droga euforizante. “Está claro que el mundo paralelo cuesta, pero recibí también muchas alegrías, igual que le ha pasado a todos los artistas que he admirado y se han lanzado a todo tipo de drogas potenciando su talento. El alcohol es la mejor droga del mundo y el mejor escudo para luchar contra los miedos estúpidos que surgen todo el tiempo y que te impiden salir hacia adelante”.
* Shia LaBeouf trabajó con Von Trier en "Nymphomaniac" pero seguro que de ese rodaje no puede sacar una anécdota tan caliente como la que ahora ha revelado. Durante su performance en una galería de arte de Los Angeles asegura haber sido violado por una mujer a principios de año. En su performance #Iamsorry, el actor se encontraba con una bolsa de papel en la cabeza con la frase "I am not famous anymore" en una habitación a oscuras, a la que se accedía a través de unas cortinas negras. El público se sentaba delante de él en completo silencio durante 10 minutos acompañados de una serie de objetos relacionados con la carrera del actor. "Una mujer vino con su novio, que en el momento en que sucedió todo esto estaba fuera. Se dedicó a pegarme latigazos en las piernas durante diez minutos y después me quitó la ropa y procedió a violarme. Había cientos de personas en la cola cuando ella salió de allí con el pelo alborotado y el pintalabios corrido. No fue nada agradable, no solo para mí sino también para su pareja". Posteriormente, y como si fuera una comedia de enredo, la novia de LaBeouf (que había acudido ese día al museo al ser San Valentín) le pidió explicaciones.
Nacho Gonzalo