Cine en serie: "Fargo", de lobos y ovejas

Querido primo Teo:

Actualmente en la televisión y en el cine se suele hablar de la falta de ideas y de originalidad, de la multitud de remakes, secuelas y spin-off. Es por ello que cuando hará ya un año y medio FX anunciaba la adaptación de "Fargo", la película de 1996 dirigida por los hermanos Coen, la reacción general ante el anuncio fue de total escepticismo y hasta de crítica, ya que no parecía que esa historia sobre un hombre que contrata a unos matones para que secuestren a su mujer diera para tanto, sino que más bien parecía que iban a destrozar el material de la película.

Pero esta percepción fue cambiando con el paso de los meses, primero con el anuncio del reparto, posteriormente al conocer que los hermanos Coen habían dado el visto bueno al guión escrito por Noah Hawley y que además estarían detrás de ella como productores ejecutivos, y finalmente con la llegada de los primeros avances, con numerosos y originales teaser, y un trailer que nos invitaba a darle una oportunidad por lo menos a su piloto.

Por suerte éste no defraudó. Uno de sus principales aciertos fue empezar de cero, abandonar la historia de Jerry Lundegaard y la detective Gunderson, a la que sí hará guiños, para adentrarnos en la vida de Lester Nygaard, un tipo amable pero débil, al que todos llevan ninguneando desde pequeño, desde sus familiares como su hermano y su esposa, hasta a los abusones del instituto que aún hoy lo siguen acosando. Un hombre sin metas cuya vida cambia radicalmente tras un encuentro casual con Lorne Malvo, un hombre de instintos, que disfruta haciendo el mal sólo por ver las consecuencias de sus actos.

Pero no fue el único acierto del piloto, en este capítulo de larga duración sus protagonistas cumplían como se esperaba de ello, y además se sentaban las bases del relato, no limitándose a trasladar (con éxito) el universo de la película y de los directores, sino que a partir de éste creaba el suyo propio. Desde este piloto, el nivel de los capítulos fue creciendo a su propio ritmo, superándose cada semana, y así tras ver los diez capítulos que componen "Fargo" podemos decir sin miedo que estamos no sólo ante el mejor estreno del año (sí, incluso mejor que "True detective"), sino ante la mejor serie de la temporada tras los ocho últimos capítulos de "Breaking bad".

A partir de este punto, querido primo, si aún no conoces como revolucionó Malvo la vida de Lester y la del apacible pueblo de Bemidji en Minnesota has de saber que habrán SPOILERS, así que lee bajo tu propia responsabilidad.

Sorprender con una adaptación

En todos sus capítulos, "Fargo" ha dado muestras de una sorprendente originalidad (sorprendente por eso de ser una adaptación), y de una gran inteligencia e imprevisibilidad a la hora de crear y trasladar a la pantalla sus tramas. Para el recuerdo, además de sus personajes, quedarán escenas como la de la tormenta de nieve, el asalto que no vemos pero que sí intuimos de Malvo a la cúpula de Fargo y rodado en plano secuencia, la tensa conversación entre Lou y Malvo, o esa escena en el ascensor con la que nos saluda el capítulo nueve.

Y gran parte de los logros de la serie se deben a Noah Hawley, el showrunner y la persona a quién se le encargó el “marrón” de adaptar la película a un formato miniserie. Él es quién consigue captar el tono de la película, y no sólo eso sino además capturar el humor negro de los hermanos y usarlo convenientemente, es quién ha construido la historia con precisión milimétrica y quién ha desarrollado todos y cada unos de los personajes. Quizás le podríamos achacar falta de credibilidad en algunos casos, o la existencia de alguna trama no suficientemente cerrada, pero lo cierto es que el trabajo realizado por el guionista es excelso, y sólo nos queda darle las gracias y aventurarle un gran futuro. Una lástima que en muchos medios el nombre de los Coen lo haya dejado en un segundo plano.

El mal y sus perversiones

"Fargo" es una historia sobre depredadores y presas, sobre lobos y ovejas, “el problema es que te has pasado toda la vida creyendo que hay reglas. No las hay. Éramos gorilas. Todo lo que teníamos era lo que podíamos coger y defender”, le dice Malvo a Lester en su encuentro en el hospital, encuentro que será fundamental para que el segundo empiece gradualmente a pasar de estar en lo más bajo a lo más alto de la cadena alimentaria. Malvo consigue su fin, pervierte a Lester (o tan sólo desvela su verdadero ser), quién acaba estallando ante la última provocación de su esposa, la mata, y desde entonces hará todo lo posible para salvar su pellejo o, en términos de la serie, hará todo lo posible para descarrilar el tren para recuperar el guante que perdió en la estación.

La manera en que se muestra la evolución de Lester es fascinante, aunque gran parte del mérito es también de Martin Freeman que está soberbio. Si bien Billy Bob Thornton está genial en un personaje que ya desde el piloto es icónico, el personaje de Lester goza de una serie de matices de los que el de Malvo carece y que Freeman va a saber aprovechar para dar una clase maestra de interpretación. Si en Malvo vemos a una persona que actúa de manera afable y educada, pero que sin embargo nunca deja de resultar inquietante e intimidador, una persona que actúa según lo que le indican sus instintos pero que oculta su destructividad en una sonrisa, en Lester encontramos más variantes.

Así empezamos viendo a un Lester afable, inocente y miedica, y progresivamente vemos crecer al monstruo manipulador, al lobo con piel de cordero, que manipula pruebas para encerrar a su hermano y se queda con una sonrisa de satisfacción, que borda los interrogatorios, y que termina convertido en un hombre de éxito, en todo lo que quiso ser. Pasa de ser un desecho sin confianza a un hombre repleto de ésta, tanta que no duda en retar a su maestro, en superar su miedo y demostrarle que ya no le puede hacer nada, “Lester, ¿es esto lo que realmente quieres?” le pregunta Malvo y éste no duda en abrir la caja de Pandora. Luego vuelve el miedo, el instinto de supervivencia, y aunque finalmente termina venciendo, su exceso de confianza y ese convertirse en depredador que le había salvado antes acaba siendo su perdición.

El bien y sus protectores

Aunque lo haga a su manera, "Fargo" recoge el esquema clásico del bien contra el mal, por ello frente a dos fuentes malignas como Malvo y Lester la serie necesitaba equilibrar la balanza moral, necesita al pastor que evite que los lobos se coman a las ovejas, o como mínimo a las menos posibles, y ese es el papel que encarnan Molly Solverson y Gus Grimly.

Molly es una agente con gran olfato, heredado seguramente de su padre, incansable, con gran sentido de la justicia, cuyos actos van encaminados a tratar de esclarecer la verdad, pero que su labor se verá constantemente por la ineficacia e ineptitud de su superior, un jefe sin estómago incapaz de ver el mal en sus conocidos.

Gus, en cambio, vendría a ser algo así como el reverso de Lester, se trata de un policía torpe y cobarde, al que nadie respeta, y que también tiene un encuentro fortuito con Malvo en el piloto, sin embargo mientras que Lester libera su instinto animal y se pervierte, la moral de Gus se lo impide, y tras el encuentro con Malvo se acaba obsesionando con atraparlo. Y aunque, al igual que Lester, al final Gus se convierte en depredador, a diferencia de éste no lo hace para satisfacerse a sí mismo ni tampoco disfruta con ello, lo hace para proteger a su familia y al resto y porque siente que es su deber hacerlo.

Estos dos personajes nos han dado una de las mayores sorpresas interpretativas del año, por un lado la hasta hace nada desconocida Allison Tolman, que borda un papel que esperamos le garantice muchos premios, y por otro Colin Hanks, actor que siempre había estado a la sombra de su padre, considerado soso y falto de carisma (algo que se acrecentó tras su personaje en la sexta temporada de "Dexter"), pero que también ralla a buen nivel en la serie (quizás porque la personalidad de Gus le viene como anillo al dedo).

El resto de fauna de "Fargo"

Si Noah Hawley ha sido capaz de trazar unos personajes principales profundos e interesantes, en lo que se refiere a los secundarios no se ha quedado atrás y ha descrito a una variada fauna de personajes muy interesantes, cuya aportación ya sea mayor o menor aporta más riqueza al universo creado, tipos que van desde el jefe de policía que sólo ve lo bueno en la gente y que vomita en las escenas del crimen, al avaricioso dueño de una cadena de supermercados, a la viuda del acosador de Lester y sus dos hijos, hasta esa pareja de matones (uno de ellos mudo) que bebe mucho de la pareja que formaban Buscemi y Stormare en la original, y que nos llega a despertar en cierto momento hasta ternura.

Quizás, como ya adelantábamos antes, se falla en que a algunos se le ha dejado algo de lado y no se les ha acabado dando un final suficiente, pero es un disfrute ver a los personajes y a los actores poniéndose en su pellejo y es que, si fuera por mí, podría rellenar la categoría a mejor actor secundario de miniserie sólo con actores de "Fargo" como Bob Odenkirk, Keith Carradine, Oliver Platt, Adam Goldberg o Russell Harvard (sin olvidar a Kate Walsh en el apartado femenino).

¿Y ahora qué?

Una vez ya terminada la temporada, queda la pregunta de qué pasará en el futuro. La serie estaba programada cómo una única temporada y la historia principal quedó atada, sin cabos y notablemente resuelta. Pero el gran éxito crítico que ha tenido la serie (y que esperemos se corrobore en forma de premios) ha llevado a FX a plantearse una segunda temporada (de la que falta confirmación oficial pero que ya se da por hecha). Noah Hawley seguiría al frente de ésta, lo que ya de por sí es una garantía, y aunque en un principio se hablaba de realizar temporadas antológicas, esto es seguir el ejemplo de "American horror story" o "True detective" y narrar una historia nueva en cada temporada, ya se está rumoreando sobre la posibilidad de que Allison Tolman y Colin Hanks, entre otros, vuelvan a interpretar sus papeles, y también se rumorea sobre la posibilidad de que se utilicen tramas que quedaron algo más abiertas como la de Stravos y el maletín o la de la venganza de Mr. Wrench.

No creo que tardemos mucho en saber cuál será el futuro definitivo de la serie, lo que sí parece claro es que si con el anuncio de "Fargo" nos mostramos totalmente escépticos sobre la posible calidad de la serie, el anuncio de una posible renovación sin embargo lo recibiremos con unas expectativas altísimas que esperaremos que se cumplan.

Vídeo

Tu primo.
Petro