Recordando clásicos: Los grandes y pequeños Estudios en la edad de oro de Hollywood (I)

Querido Teo:

El sistema de los grandes Estudios de Hollywood se puede considerar como algo único. Generó una gran producción de películas que son consideradas como el resultado final de la edad de oro en la industria. El fenómeno de Hollywood se adaptó a la cultura americana, especialmente a las tendencias de la época dentro de un país donde el materialismo, el enriquecimiento, el ascenso social y la expansión de los mercados estaban relacionados de manera intrínseca. Hollywood y sus Estudios reunieron todo aquello, reflejando la ideología corporativa que llevó a Estados Unidos ser el líder mundial en materia económica. La manera de actuar de un Estudio de Hollywood no difería a la de otras fábricas americanas en métodos de producción y rendimiento.

Hollywood, a su vez, atrajo a gentes del todo el mundo, desde Inglaterra y la vieja Europa, hasta América Latina, Oriente, Australia y, por supuesto, de la propia América del Norte. A mediados de 1913, Hollywood dejó de ser un campo minero para convertirse en una ciudad industrial. En los años 20 fueron apareciendo los primeros cuatro grandes Estudios: Metro-Goldwyn-Mayer, Paramount, Fox y Warner Bros. El glamour que Hollywood desprendía llevó al público americano a querer ver una imagen atractiva de sí mismos. Eran las imágenes de América, la cual muchos creían que era real y vinieron con la expectativa de que la vida en los Estados Unidos sería como en las películas. Y esas estrellas de Hollywood, en consecuencia, se convirtieron en ídolos, como héroes. Esas estrellas consideraban su fama como un negocio. Los directivos de esos Estudios eran, en su mayoría, gente que provenía del mundo del espectáculo pero también eran hombres de negocios cuya actividad era el ocio. Fabricaban entretenimiento. Ya en 1919, un 80% de las películas que se producían en el mundo eran realizadas en Hollywood. Poco después, los Estudios empezaron a cotizar en bolsa y la realización de películas se había convertido en un gran negocio, además de empezar a emerger nuevas compañías cinematográficas. En 1929, ya con la llegada del sonido, Hollywood estaba cruzando el umbral hacia su edad de oro desarrollando sistemas contractuales y adquiriendo salas de proyección. Hollywood se convirtió en la capital mundial del glamour.

Fueron apareciendo los pioneros, los primeros magnates de los Estudios y de Hollywood. Surgieron figuras como Carl Laemmle, fundador de Universal Pictures, la cual fundó asociándose con tres grupos más pequeños. En 1914 compró un rancho donde construyó Universal City, sede permanente de los Estudios. En 1915 produjeron cerca de 250 películas. A diferencia de las otras majors, Universal no poseía salas de proyección y, en consecuencia, junto con Columbia y United Artists, se convirtió en miembro de lo que la industria denominaba “las tres pequeñas". También estaba Paramount bajo el mando de Adolph Zukor, líder en la producción de películas mudas con un punto álgido de 156 películas anuales y con unas 200 salas de proyección.

Metro-Goldwyn-Mayer, fundada en 1924, era un gran rival de Paramount. La capacidad directiva de Mayer se complementó con Irving G. Thalberg, quien se convirtió en jefe de producción de la Metro. La política de Mayer consistía en contratar a los mejores y en 1943 Metro-Goldwyn-Mayer era reconocida como la gran fábrica de sueños de Hollywood. Por otra parte estaba William Fox, que fue pionero en el sistema de adición de sonido en la propia película que se demostró superior a los discos anteriormente utilizados. Pero fue Warner Bros., en 1927, quien dio el gran paso con la introducción del sistema Vitaphone. Warner distribuía sus películas a través de First National. En 1926 el negocio cinematográfico se había convertido en una de las industrias más importantes de Estados Unidos. Ir al cine se convirtió en una costumbre. Con la llegada del sonido, apareció el último de los grandes Estudios: RKO. Fue fundada en 1928 y no llegó a desarrollar un estilo único a pesar de su continua expansión.

En 1933 todos los Estudios de Hollywood habían sufrido graves problemas financieros. William Fox tuvo que hacer frente a una bancarrota. Darryl F. Zanuck formó en 1933 la 20th Century Pictures con Joseph Schenck. Y Fox necesitaba de alguien con liderazgo. En 1935 las dos compañías se unieron y nació la 20th Century Fox, con Schenk como presidente y Zanuck como vicepresidente. Se adquirió una cadena de salas y una lista de estrellas formada por Shirley Temple, Will Rogers, Tyrone Pwer, Alice Faye, Don Ameche, etc... Zanuck hizo de los guiones su mayor atractivo contratando a reputados escritores como Nunnally Johnson, Lamar Trotti y Philip Dunne.

Paramount tuvo una crisis en 1932, reorganizándonse tres años más tarde. Su éxito dependía de los musicales de Bing Crosby, el cine-espectáculo de Cecil B. DeMille y las comedias de Mae West. Paramount se ganó la reputación de producir películas excepcionalmente acabadas. En sus Estudios tenían un ejército de carpinteros, pintores, electricistas, etc…, llegando a contar con cerca de 3.000 trabajadores. MGM se convirtió en el estudio del glamour. Era el Estudio más grande, tenía las mayores estrellas, los mejores departamentos de música, diseño, atrezzo y cámara convirtiéndose sus películas en las más lujosas de Hollywood. Warner Bros. tenía la reputación de ser más dura, de pagar menos y exprimir al máximo a sus artistas llegando incluso a estar hostigado por disputas laborales. Warner Bros. hizo gala de una gran realismo en sus producciones, con un gran uso del blanco y negro. Pero además produjo películas inolvidables y grandes musicales en technicolor.

Universal formaba parte de las denominadas “tres pequeñas”. Durante años tuvo una directiva mediocre pero la contratación de Deanna Durbin, gran estrella adolescente de la época, salvó al Estudio de la bancarrota gracias a los resultados de esta artista en taquilla. La producción de Universal se basó en películas de Durbin, un montón de películas de horror, comedias de Abbott y Costello y películas de aventuras exóticas, además de westerns y musicales baratos. Alguna vez rodaban alguna película grande para lograr cierto prestigio. Columbia estaba dirigida por Harry Cohn, que optó por gastar el dinero en la producción y pedir cedidos a los otros Estudios a los actores. La única gran estrella de Columbia era Rita Hayworth. Los westerns, las comedias baratas y las películas de serie B eran la piedra angular del Estudio. Donde Cohn gastaba más su dinero era en las producciones de Frank Capra y los musicales de Rita Hayworth. United Artists fue fundada en 1919 por los cuatro nombres más importantes de la industria del momento: Charles Chaplin, Mary Pickford, Douglas Fairbanks y D.W. Griffith. Durante años, UA poseyó una pequeña cadena de salas de proyección. En 1935, su Estudio se convirtió en el Samuel Goldwyn Studio, siendo alquilado a productores independientes.

Hubo otros Estudios menores como Eagle-Lion, que se reveló como un pequeño Estudio de importancia. Actores como Susan Hayward, Robert Cummings y Robert Preston hicieron películas para Eagle-Lion pero la empresa duró pocos años debido a su precariedad financiera. Monogram emergió durante la Depresión con el auge de la sesión doble con películas de Charlie Chan, westerns de serie B y seriales. A finales de los años 40 fue rebautizada como Allied Artists. Aunque el mejor de estos Estudios menores era Republic Pictures, fundado en 1935 por Herbert J. Yates y que se especializó en westerns de bajo presupuesto y seriales. La calidad técnica de sus películas era notable, con gran calidad de sonido y dirección seria. Además usaba el trucolor, más barato que el technicolor.

Y es que durante la edad de oro de Hollywood, todos los Estudios eran como ciudades en miniatura que contaban con sus propios artistas y trabajadores. Y a pesar de todo ese glamour, los grandes Estudios encarnaron un sistema hecho a imagen y semejanza del de los negocios.

Javi Leiva