Cine en serie: "Salem", entre brujas anda el juego
Querido Teo:
Estamos a punto de entrar en plena temporada de pilotos y, mientras esperamos la avalancha, tenemos algunos estrenos para ir abriendo el apetito. En este caso te hablaré de “Salem”, una serie ambientada en la época de las famosas cazas de brujas, con un detalle de importancia respecto a otras series de época, y es que en este caso las brujas son muy reales.
La historia nos sitúa en el famoso pueblo de Salem en 1685, un lugar gobernado por un pastor muy estricto y decidido a castigar con severidad a los que no cumplan a rajatabla con sus preceptos morales. De hecho, la escena inicial nos regala un bonito encuentro entre un hierro al rojo vivo y la frente de uno de esos pecadores, para que nos vayamos haciendo una idea de que aquí el sentido del humor no tiene mucha cabida. Aquí será cuando conozcamos a John Alden, habitante de Salem y poco amigo de las formas del pastor, algo que no duda en hacerle saber. Pero no podremos ver mucha pelea entre ambos, porque John decide alistarse en el ejército, para una guerra que cree que sólo durará un año como mucho.
Siete años después, recién terminada la guerra, el ahora capitán Alden regresa a Salem tras pasar todos estos años fuera. Y lo que se encuentra al volver es un pueblo dominado por el miedo y la superstición, con un nuevo pastor con pinta de loco que habla de brujas, y de cómo van a acabar destruyendo el pueblo. Pero el pastor no es lo único que ha cambiado en estos años, la que entonces era su amante se ha convertido en la esposa del antiguo pastor, y la mujer más influyente de Salem. Habiendo dado por muerto a John y con algún que otro oscuro secreto por su parte.
El mayor de los “secretos” de Salem que John descubrirá nada más llegar es que el nuevo pastor no está tan loco como parece, porque las brujas de las que habla existen realmente. No sólo eso, sino que han conseguido infiltrarse en la sociedad de Salem y en sus círculos más influyentes. De repente el pastor deja de ser un chalado religioso y su preocupación por el futuro de Salem se convierte en un problema real, uno al que deberá hacer frente nuestro protagonista si no quiere que se extienda por el resto del país.
El casting de actores es una curiosa mezcla, con Shane West, que tras verle en “Nikita” se pone en las botas de nuestro protagonista. Le da la réplica Seth Gabel (Fringe) como el pastor Mather, con un cambio de look radical respecto a su participación en la popular serie de ciencia ficción. Janet Montgomery interpreta a Mary, el antiguo amor de John y que ahora ha forjado unos lazos muy cerrados con las brujas que amenazan el futuro del pueblo y, a largo plazo, del país entero.
Las críticas le dan una de cal y otra de arena, especialmente por parte del público. Los críticos coinciden en que “Salem” merece una oportunidad por atreverse a hacer algo un poco diferente, aunque se enfrenta a una dura competencia. Entre el público la reacción es algo más diversa, con algunos espectadores molestos con la manera en la que la Iglesia aparece retratada, aunque debo decir que me parecen un poco excesivas las quejas teniendo en cuenta lo que sabemos que sucedió realmente en aquella época.
Parece que este periodo de la Historia americana está siendo últimamente una importante fuente de inspiración para los guionistas de televisión ya que, además de “Salem”, tenemos al caballero Ichabod Crane en "Sleepy Hollow", y la también recién estrenada "Turn", en la que se cuenta la historia de los espías que trabajaban para George Washington. Por supuesto, “Salem” no tiene el rigor histórico que, al menos en parte, le podemos suponer a “Turn”, pero sigue siendo un punto de partida para el que tenga interés en lo que realmente sucedió durante la caza de brujas.
Atentamente.
Profesor Falken