Cine en serie: "El tiempo entre costuras", calidad made in Spain
Querido Teo:
No solemos comentar por aquí series de nuestra tierra. Quizá la experiencia nos haya hecho generalizar en exceso y estemos predispuestos a verlas con malos ojos desde el principio. La verdad es que a mi entender la base es buena, con un mercado cinematográfico y literario muy rico y con estilo muy personal y con una base de fans y espectadores muy sólida. Pese a ello, las expectativas creadas en algunos casos han sido un tanto ambiciosas ("Cheers") o bien se ha subestimado al público en un momento en el que internet, o simplemente la contraprogramación, son suficientes para cambiar si el resultado no es de calidad.
Y es que lejos queda ya Mercero y demasiado cerca series que tienen su propia cadena de emisión (hablo de los vecinos de "Aquí no hay quien viva" y "La que se avecina", un "Rue del percebe" que copa la programación nocturna) pero cuya aportación es minúscula comparada con su duración en antena.
Pero este caso del que te vengo a hablar es diferente. Es verdad que "El tiempo entre costuras" parte de un bestseller y que eso ya te garantiza al menos parte del éxito de partida, pero también te exige no defraudar a los más de dos millones de lectores del libro. Traducido a una veintena de idiomas, leo que los derechos de la serie ya estaban en manos de Antena 3 desde hace años pero posiblemente el riesgo de una miniserie de esta envergadura en época de crisis la haya relegado al cajón todo este tiempo.
La serie narra la historia de Sira Quiroga (Adriana Ugarte, "La señora" y "Hospital central"), una mujer que debido a ciertos giros del destino se ve obligada a enfrentarse a la vida por sí sola, abandonada en el Marruecos de la época de la Guerra Civil española. No te voy a contar más porque te destrozaría la historia, tan sólo te diré que al principio de la serie nos darán un detalle del desarrollo de la misma que al menos a mí me obligará a verla hasta el final (y ese es el fin de cualquier serie, ¿no?). Criada en una familia monoparental (en aquella época), la formación de modista servirá a nuestra protagonista para salvar el pellejo en más de una ocasión.
Completan el reparto de la serie la madre de Dolores Quiroga (Elvira Mínguez, "Hermanos" y "Imperium"), madre "de las de antes", su primer pretendiente Ignacio (Raúl Arévalo, "Primos" y "Los amantes pasajeros"), y toda una serie de personajes, tanto ficticios como reales, que nos acercarán a la difícil situación de aquella época. Destacaremos actores de la talla de Tristán Ulloa, Carlos Santos o Francesc Garrido, algunos muy metidos en la "escena nacional" de series de televisión.
La miniserie está estructurada en 11 episodios de 70 minutos (dos horas al verlo en televisión y los maravillosos consejos comerciales entre escena y escena) y la acogida por el momento ha sido espléndida, con un 25% de share y unos cinco millones de espectadores. Termina en Enero del año próximo para quien no quiera sufrir y espere a verla de cabo a rabo.
En cuanto a la forma de cómo está construida y la trama en sí, no sabría decirte (ya que no he leído el libro) si es tan previsible porque es poco original o porque está muy estudiado que el público está esperando ese u otro tipo de giro y se sienten seguros así. Pese a que el planteamiento de inicio si me parece interesante y original, hay ciertos momentos en los que dices "Sira, que te van a engañar, que por ahí no...." y al final qué pasa... pues lo que pasa.
A mí me ha gustado como desintoxicante del inglés, los subtítulos y los efectos especiales. A parte, existe cierto morbo en este país por todo lo que suene a guerra civil, franquismo, "Cuéntame", etc… de ahí el éxito del libro y serie. Una cosa que me ha llamado la atención, y que me tira para atrás por parecerme muy poco profesional, uno de los actores (chicas, ya sabéis de quien estoy hablando) pone sólo cacha y es doblado por un actor de doblaje, válgame la redundancia. ¿Realmente no tenemos actores suficientemente guapos que puedan salir a escena y decir su papel y no tener que recurrir a un pastiche como este?
Bueno, lo dicho, que hay que consumir más producto nacional que eso reactiva la economía.
David Volcano