Cine en serie: "Fringe" se despide

Querido Teo:

El pasado día 18 se emitieron los dos últimos episodios de "Fringe", cerrando la historia que se inició en Septiembre de 2008 y dejándonos sin una de las pocas buenas series de ciencia ficción que quedan en la parrilla. En estos cuatro años y medio hemos visto evolucionar la serie desde un planteamiento puramente procedimental, en el que cada semana veíamos a los protagonistas descifrar el “misterio de la semana”, a otro más hilvanado y con una conspiración detrás de la que no se nos dejaba ver la intención pero que hacía un todo de esas pequeñas partes. No contentos con esto, los guionistas decidieron dar un paso más allá y embarcarse en la ciencia ficción, para terminar con un futuro casi post-apocalíptico y la misión de salvar el mundo.

O tal vez no. A lo mejor durante estos años la serie ha mantenido su género durante todo el tiempo, y nos hemos dejado engañar una vez más por los artificios del amigo J.J. (que a pesar de lo mucho que nos hace sufrir a veces, le seguimos queriendo como el primer día). El mismo que nos enseñó que lo que parece un flashback a veces es un flashforward, nos enseña ahora que una serie dramática puede tomar muchas formas. Y es que los dos últimos episodios de “Fringe” no son sino la confirmación de que lo que estábamos viendo era una historia romántica, la de Olivia y Peter, capaz de sobrevivir a todo tipo de penalidades e incluso a que uno de los dos desaparezca del continuo espacio-tiempo. Si eso no es amor, a mí que me lo expliquen.

Y bajo todo ese manto de tecnología futurista también estábamos viendo la historia de una relación padre-hijo muy especial, una muy difícil y llena de sacrificios y compromisos por las dos partes pero cargada de esperanza, de que hay espacio para el perdón y la reconciliación. También hemos visto durante estos años como la relación entre Astrid y Walter ha ido cambiando, desde la canguro encargada del científico chalado a ayudante de laboratorio de un genio, para terminar como casi un miembro más de la familia.

Y es tal vez la familia el punto central de este drama, porque Walter es capaz de arriesgar la integridad del universo para salvar a su hijo en un primer momento, para luego ofrecer su propia vida para restaurar el equilibrio que él mismo rompió. Y lo mismo nos pasa con Olivia y Peter, porque salvar el mundo puede ser una tarea importante, pero no nos engañemos, su objetivo final no es otro que recuperar a su hija a cualquier precio.

Acerca de los episodios en sí, además de dar el cierre a la historia y dejar un guiño al final (luego volveré sobre esto), nos sirven para volver a visitar el universo alternativo y saber qué es lo que ha pasado estos años con la otra Olivia. Y aquí se nos muestra otra vez el tema central de la serie, porque la Olivia alternativa también ha optado por la familia aunque con otra pareja (al parecer sólo hay sitio para un único Peter en todos los universos paralelos). ¿Innecesario?. No lo creo, sobre todo si seguimos bajo la premisa de que estamos ante un drama y lo importante al final es saber qué ha pasado con los protagonistas. También sirven de homenaje al resto de la serie, dando un último propósito a las aberraciones científicas que se investigaban en los primeros episodios.

Son dos horas llenas de momentos emotivos, ya que el hecho de que Walter conozca su destino le da la oportunidad de despedirse tanto de Peter como de Astrid. Y a pesar de las buenas intenciones de Septiembre, el momento en que Walter cumple con su destino y Peter le dedica una última frase resulta también muy conmovedor. En cuanto a los últimos momentos, la escena del parque nos deja claro que todo va a ir bien y que ha valido la pena esperar y pasar tantas dificultades.

Volviendo al guiño final, a la última reacción de Peter al ver el contenido del sobre, no esperaba menos de esta serie, un gesto de menos de medio segundo que seguro dará material de discusión para mucho tiempo. Tiraré la primera piedra diciendo que de repente le viene un recuerdo de Walter, uno que no debería tener.

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Atentamente.
Profesor Falken