BSO de "The amazing Spider-Man"
Querido Teo:
La repercusión de James Hormer hoy en día no es la misma que en su época dorada de los 90, pero no se debe despreciar su trabajo. De hecho, las últimas bandas sonoras del que se proclamó "sucesor del trono de John Williams" son bastante interesantes. En esta ocasión, nos centraremos en la BSO del arriesgado reboot de las aventuras de Spider-Man, tomando el relevo con el personaje de otro grande como Danny Elfman. Hay que reconocer que las críticas de autoplagio que siempre le rodean parecen haber hecho mella y es complicado encontrar en esta ocasión esas autoreferencias, aunque existen ("El hombre bicentenario" es la más clara, a mi juicio, aunque algunos pasajes recuerdan también a "Titanic"). Tema central pegadizo (y simple) muy utilizado durante toda la BSO, como marcan los cánones de la música de películas de superhéroes, al estilo Horner, con viento metal cada vez que puede y sin renunciar a los instrumentos electrónicos. Producto muy bien cuidado, con el sello de calidad de Sony Classical.
Datos técnicos
The amazing Spider-Man
James Horner
Sony Classical
Número de tracks: 20
Oigamos algunos fragmentos de la banda sonora.
Main title (Track 1)
Becoming Spider-Man (Track 2)
Rooftop kiss (Track 12)
Promises (Track 20)
E. González
Cada vez que oigo recurrir al tema del autoplagio de James Horner me da la risa. Horner, un grande, utiliza los mismos motivos para identificar conceptos (su "parabará" no es más que la señal del peligro, por ejemplo), por lo que su manera de entender la música de cine difiera de las de los demás compositores pese a que haya creado escuela.
En los últimos años ha sabido desprenderse del paraguas de Hollywood para hacer lo que a él le ha dado la gana y con los directores que él ha querido, pero tiene en su haber una de las mejores partituras del nuevo milenio, "Avatar", una obra excelsa que ha sabido también innovar en el género.
Horner sigue siendo un grande, sin pretender nunca ser el sucesor de John Williams ni del gran Jerry Goldsmith. Cada partitura de Horner merece por lo menos nuestra atención.