"Fly me to the moon"

La web oficial.

El argumento: Ambientada en el histórico alunizaje del Apolo 11, en 1969. Llamados para mejorar la imagen pública de la NASA, las chispas vuelan en todas las direcciones cuando la prodigio del marketing Kelly Jones causa estragos en la ya difícil tarea del director del lanzamiento Cole Davis. Cuando la Casa Blanca considera que la misión es demasiado importante para fracasar, Jones recibe la orden de simular un alunizaje falso como respaldo, comenzando la verdadera cuenta atrás...

Conviene ver: “Fly me to the moon” no es el biopic de Frank Sinatra que podría sugerir su título sino un cruce de comedia romántica con sabor a “screwball comedy” y un thriller político a partir de todo el contexto histórico que rodea al alunizaje del Apolo 11 que fue fijado para el 20 de julio de 1969 en un momento en el que los rusos han tomado la delantera en la carrera espacial y el pueblo de Estados Unidos vive consternado por las consecuencias de la Guerra de Vietnam y las revueltas y episodios luctuosos del final de la década. Un revulsivo que lleva a que buena parte del estilo de la cinta recuerde a esas películas de Rock Hudson y Doris Day contando ahora con Channing Tatum y Scarlett Johansson como reclamos (productores de la cinta) pero también a los thrillers de espionaje, conspiraciones e intrigas de despacho que tanto proliferaron en la década de los 70. Eso sí, el resultado es de perfil bajo no porque la película se note caduca y trasnochada (que también) sino porque en su conjunto es dispersa, artificiosa y torpe. Una reconstrucción de la época vistosa y luminosa que apuesta más por la nostalgia y el encanto que por el rigor y la verosimilitud y que se ríe sobre las teorías sobre la no llegada del hombre a la luna lo que no es suficiente para dar chispa a una película sin fuelle tanto en estructura como acabado sobre una carrera espacial que es un desastre con un buen número de pruebas fallidas y que tuvo que fomentar el espíritu de equipo para llegar a buen puerto sustentándose en la confianza de sus artífices de que en realidad sí era posible conseguirlo a pesar de los baches. Pretende ser refrescante y evasiva pero aunque empieza bien termina deshilachándose sacándole poco partido al potencial de la historia de esta publicista de Nueva York que es capaz de vender lo que sea y persuadir a quien se proponga siendo contratada por la NASA para mejorar el apoyo popular de la misión a la luna y conseguir fondos gubernamentales para ello e incluso organizar una versión alternativa del alunizaje en caso de que fallara la misión principal del Apolo 11 y que siempre se rumoreó que fue llevada a cabo por Stanley Kubrick aunque en la cinta se le da la vuelta a ello. Lo mejor es precisamente el viaje del personaje de Scarlett Johansson desde una responsable de marketing sin escrúpulos hasta una mujer honesta consigo misma y comprometida con su tiempo y con los demás frente a la férrea moral con principios del director de lanzamientos que está obsesionado de manera meticulosa con su trabajo y poco dado a eslóganes y canciones publicitarias al que interpreta Tatum surgiendo durante la misión la chispa entre ellos. Una propuesta en la que también destacan Woody Harrelson, Ray Romano y Jim Rash y que habla del trabajo en equipo en esta misión hacia lo desconocido que de una empresa incierta paso a ser celebrada como un orgullo y un chute motivacional para todo un país pero que a ojos de fuera de USA puede resultar demasiado cursi, almibarada y trasnochada.

Conviene saber: La película está dirigida por Greg Berlanti.

La crítica le da un CINCO