Espresso: Ramón Chao, Prisciliano y una unión de 1.600 años
Querido Teo:
Los que andéis por Vigo el viernes 6 de octubre tendréis a mano el ver un documental peculiar en el Festival que se está celebrando en la ciudad. Es un producto con denominación de origen Galicia en todos sus componentes. Gallego y cristiano fue el revolucionario Prisciliano, del que en realidad se sabe tan poco con certeza en su lejano siglo IV, que permite deducir y suponer muchas cosas sobre uno de los personajes más interesantes de su siglo.
Gallego es Ramón Chao, otro revolucionario al que vale la pena reconocer y del que todavía se puede saber el motivo de su enraizamiento en París; y cuya dedicación a reivindicar a uno de los primeros decapitados por herejía, ya expresó en un libro hace años. El padre de Manu Chao, que aporta su música en el documental, fue un niño prodigio del piano y un adulto prodigio de muchos amigos esparcidos entre Galicia y París.
Y gallego es el creador principal del asunto, el instigador cultural Aser Álvarez, tipo inteligente, capaz, buen argumentador y con la capacidad de caer tan bien como la mejor empanada de su tierra.
El documental "Tras las huellas de Ramón Chao y Prisciliano" parece en ocasiones una película de carretera, resto de la idea inicial que consistía en viajar en Vespa desde París a Galicia tras las huellas de Prisciliano. La muerte de Chao ha dejado sus propias huellas y lo aproxima al lejano disidente.
Carlos López-Tapia