"La jauría"
La web oficial.
El argumento: Eliú, un chico de campo, es encarcelado en un centro experimental de menores en el corazón de la selva tropical colombiana, por un crimen que cometió con su amigo El Mono. Todos los días, los adolescentes realizan un trabajo físico extenuante y una intensa terapia de grupo. Un día, El Mono es trasladado al mismo centro y trae consigo un pasado del que Eliú intenta huir.
Conviene ver: “La jauría” habla de jóvenes descarriados en un centro experimental de menos en el corazón de la selva tropical colombiana donde intentan huir de su pasado con la esperanza de un futuro mejor. Una ópera prima hipnótica que se aprovecha bien de ese desolador entorno entre precariedad, trabajos forzados, intensas terapias de grupo y deudas que vuelven a llamar a la puerta apostando por un naturismo y una crudeza que imprime toda la cinta en el que la ausencia de referencias paternas, la violencia y la desolación lo inunda todo, con un espacio y tiempo difuminado, creando lazos entre estos marginales abandonados a su suerte en ese lugar selvático y que sólo tienen a su favor la ley del más fuerte. A pesar de ello no abandona cierto atisbo de esperanza aunque vaya de más a menos ya que donde radica el interés es en cómo retrata la fuerza del entorno y de esa naturaleza tan reparadora como peligrosa en medio de la nada en el que ese reformatorio es sólo una burbuja sobre cuyas rendijas entra la tortura y el fanatismo en pro de una reinserción que sólo ahonda más en la ruptura emocional y la sed de venganza en una espiral de la que es muy difícil escapar para gente que ya está rota y que se le ve como insalvable por los propios que tienen que darles un atisbo de futuro que deja al protagonista sin recursos ni horizontes aunque de verdad intente huir de todo ello. Eliú quiere encontrar su lugar en el mundo alejado de todo ello mientras que El Mono, el amigo con el que cometió el crimen que le ha llevado hasta ahí, representa a esa juventud que asume una violencia congénita que no pretende ser erradicada sino perpetuada. El director confronta con solvencia diversas vías para esos jóvenes, representada en el diferente estilo de sus instructores, fusionando la crudeza del cine colombiano reciente (con ejemplos como "Monos" o "Los reyes del mundo") a la hora de mostrar la desesperanza juvenil conectando con "Los olvidados" de Luis Buñuel, "La ciénaga" de Lucrecia Martel y el lirismo sensorial propio de Apichatpong Weerasethakul. Un trabajo lucido sobre el origen de la violencia que no destaca sobre otras cintas similares pero que cumple con dignidad a la hora de mostrar la posibilidad de renacer de nuevo aunque las cartas estén ya marcadas.
Conviene saber: Ganadora de la Semana de la Crítica en el Festival de Cannes 2022, en la sección Horizontes Latinos del Festival de San Sebastián 2022 y nominada al Goya 2023 a la mejor película iberoamericana.
La crítica le da un SEIS