“Asedio”
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El argumento: ¿Qué es ser español? Dani lo tiene muy claro. En su caso es servir a su país como antidisturbios, honrar su bandera y hacer cumplir la ley. Siempre pensó que ser policía era una forma de proteger a la gente, de hacer justicia. Pero durante un desahucio en un barrio conflictivo de Madrid, Dani se encontrará con un dinero escondido, una trama de corrupción policial y un crimen que harán que tenga que huir por su vida en un territorio hostil, en el que no conoce el idioma, no es bien recibida y su autoridad no vale nada. Sólo podrá contar con la ayuda de Nasha, una joven nigeriana a la que acaba de desahuciar, y su hijo Little. Y será entonces cuando se dé cuenta de que si el sistema para el que trabaja no sólo no es la solución, sino que quizás siempre fue parte del problema.
Conviene ver: “Asedio” es la nueva película de Miguel Ángel Vivas, un director especializado en presentar situaciones al límite. En esta ocasión sigue a Dani, una mujer dispuesta a sobrevivir en un entorno de hombres, como agente antidisturbio. Ella es consciente de que con su profesión está realizando una función social pero también que se mueve en un mundo que ha sido abandonado por el Estado. Un día tiene que acudir a una zona conflictiva de Madrid para asistir a un complicado desahucio de un bloque de pisos habitado por migrantes y ahí encuentra por casualidad un dinero escondido, lo que dará paso al descubrimiento de una trama corrupta entre sus compañeros, dejándola expuesta a una amenaza superior y teniendo que recurrir al apoyo de las personas del edificio para poder escapar, sabiendo que ahí es enemiga a batir. “Asedio” es adrenalínica y se nota un rodaje duro e intenso y exigente. A lo largo de 99 minutos Vivas convierte un escenario tan reducido como es un edificio en un parque de atracciones. La dirección de “Asedio” es un ejercicio de estilo en el que hay una cuidadosa planificación de ideas y movimientos de cámara, técnicamente es apabullante. Natalia de Molina está sobresaliente en la piel de una mujer muy metódica que ha hecho callo a base de estar en situaciones comprometidas pero que se encuentra en territorio que le es todavía más hostil, desamparada en una tierra en la que es una presa fácil, en un mundo de hombres, y planteándose a qué tipo de sistema representa porque solamente encuentra apoyo en la mujer a la que ha acabado de desalojar del piso en el que vivía junto a su hijo pequeño. Todo mientras lidia con su propia carga personal de tener una madre enferma enfrentándose al propio sistema del que forma parte. “Asedio” es una montaña rusa que recuerda a exhibiciones sobre las acciones de los antidisturbios de las recientemente estrenadas “Antidisturbios” (2020), la serie de Rodrigo Sorogoyen, y “Atenea” (2022) de Romain Gavras teniendo la habilidad de mostrar nervio pero también denuncia de los invisibles. La lástima es que funciona mejor como muestra de género de acción que como reflexión social, su guión posee la voluntad de trascender a la huida de una ratonera pero tiende demasiado a subrayar su discurso.
Conviene saber: Nuevo trabajo cinematográfico de Miguel Ángel Vivas, responsable de títulos como "Reflejos" (2001), "Secuestrados" (2010) y "Tu hijo" (2018).
La crítica le da un SEIS