"20.000 especies de abejas"

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El argumento: Cocó, de ocho años, no encaja en las expectativas del resto y no entiende por qué. Todos a su alrededor insisten en llamarle Aitor pero no se reconoce en ese nombre ni en la mirada de los demás. Su madre Ane, sumida en una crisis profesional y sentimental, aprovechará las vacaciones para viajar con sus tres hijos a la casa materna, donde reside su madre Lita y su tía Lourdes, estrechamente ligada a la cría de abejas y la producción de miel. Este verano que cambiará sus vidas obligará a estas mujeres de tres generaciones muy distintas a enfrentarse a sus dudas y temores.

Conviene ver: “20.000 especies de abejas” es una nueva muestra del talento emergente de las directoras del nuevo cine español con Estíbaliz Urresola uniéndose a nombres como Carla Simón, Pilar Palomero, Alauda Ruiz de Azúa, Carlota Pereda, Elena López Riera, Celia Rico, Belén Funes, Lucía Alemany, Clara Roquet o Carol Rodríguez Colás. El primer largo de Urresola se centra en un niño de ocho años que no se amolda a su entorno, porque manifiesta sentirse de otro sexo, y las consecuencias provocadas en su familia, dedicada a la cría de abejas y la producción de miel, especialmente en su madre. Una cinta que destaca por su sutileza a la hora de abordar la transexualidad en un contexto rural (y más en una época como la infancia) y también por la excelente labor de sus actrices, Patricia López Arnáiz, Ane Gabarain y Sofía Otero. Una estupenda llevando su propio drama a cuestas, la segunda en un personaje libre, conmovedor y edificante y la tercera llenando la pantalla con una mirada que recuerda a la de Ana Torrent en “El espíritu de la colmena” (1973).

“20.000 especies de abejas” intenta educar y normalizar, más que buscar culpables o poner el dedo en unos y otros entendiendo las posturas tanto de unos como de otros porque el pensamiento fluye tras el bagaje de la propia vida que crea diferentes miradas ante un mismo hecho. Habla de una sociedad tolerante frente al prejuicio y el estigma y en, sobre todo, saber respetarse y amar, entrando en la cotidianidad de los problemas del día a día para una serie de personas que encuentran en los demás el rechazo en la mirada y en la actitud combatiendo frente a ello con valentía, naturalidad y honestidad. Una trabajo naturalista y sencillo en su puesta en escena que invita a escuchar y aceptar. Un guión bien medido y unas estupendas interpretaciones son las que elevan a una película que, en caso contrario, hubiera sido monótona ante lo escueto de su premisa, su tono pedagógico e instructor y su forma documental que lleva a mostrar más que expresar con una serie de mujeres que viven ante sus conflictos internos intentando seguir adelante con dudas pero como mejor pueden. Una cinta valiente que parte de una premisa existente con un conflicto pocas veces abordado en pantalla abrazando un estilo de cine que tanto formal como temáticamente se está convirtiendo en denominación de origen del cine español de los últimos años con un cine social, siempre presente, pero acercándose a él desde el detalle, la reflexión y el tono de autor lírico.

Conviene saber: Mejor interpretación protagonista en el Festival de Berlín 2023 y ganadora del Festival de Málaga 2023.

La crítica le da un SIETE