Venecia 2010: Los números primos no casan, samurais gores y un hombre corriente caradura

Querido Teo:

Que Quentin Tarantino aplaudiera entusiasmado en el pase de “Balada triste de trompeta” y que Álex de la Iglesia se quede hasta el domingo en Venecia (aunque es debido a otros asuntos y estaba confirmado desde antes de proyectarse la película), quizás pueda significar que la apuesta española se lleve algo de provecho en el palmarés. Y es que pocas películas (salvo “Black swan” y “Somewhere”) han tenido cierta unanimidad que las pueda colocar como posibles ganadoras. Una edición de nivel medio y aceptable pero que tampoco será muy recordada. Sobre todo por la proyección de “La soledad de los números primos” y “13 assassins”.

“La soledad de los números primos” es la cuarta y última película italiana a concurso. La cinematografía de aquel país no parece pasar una buena época si atendemos a las películas que se han visto en esta edición. Todas con críticas muy flojas y poco interés. No ha mejorado esa sensación con la adaptación del bestseller de Paolo Giordano. La historia gira en torno a Alice y Mattia, dos personas que intentan avanzar en su vida, a pesar de que su infancia trágica les haya convertido en seres inadaptados que nunca podrán estar juntos. Ha habido poca empatía con lo que se ha proyectado sobre todo por la grandilocuencia y pretenciosidad con la que se narra.

“13 assassins” de Takashi Miike lleva a cabo un remake de una película de 1983. El film se ambienta en el Japón feudal y refleja la revuelta de unos samuráis contra su señor. Mucha sangre y violencia para esta revuelta con unos efectos sonoros a tope. Teniendo en cuenta como le gusta Miike a Tarantino, y que es un ejercicio de cine de samuráis de toda la vida, quizás podría rascar algo aunque es una película demasiado de género y con demasiada coreografía de la violencia para ser tomada en serio. Eso si, la película recuerda mucho al clásico “Doce del patíbulo” que dirigió Robert Aldrich.

Hoy viernes se encara la última jornada y lo más destacable es la presencia de Paul Giamatti como protagonista de “Barney´s version”, junto al “Drei” de Tom Tykwer. El guionista Michael Konyves adapta la premiada novela homónima de Mordecai Richler, respetando la historia original que tiene por protagonista a Barney Panofsky, un vividor que se casó tres veces y que tuvo todo tipo de aventuras profesionales y personales. Un hombre con una vida completamente devastada que se encuentra pasando por una tremenda mala racha y además todo se ve agravado por sus problemas con el alcohol. En ese momento empezará a escribir un libro acerca de su penosa existencia. Uno de esos papeles de perdedor y fracasado (con cierto punto de ironía y amargura vital) que tan bien se le dan al bueno de Paul Giamatti. Así define el actor al personaje: “un romántico frustrado, lo que hace que a veces se convierta en alguien muy dulce y otras sea un bastardo, en un grano en el culo". Acompañan al actor Dustin Hoffman, Rosamund Pike, Minnie Driver, Scott Speedman, Bruce Greenwood y Rachelle Lefevre. Muy atentos a Giamatti de cara al premio a mejor actor ejerciendo impecablemente, una vez más, como el perfecto hombre normal y corriente.

Afortunadamente, entre cine y diluvios, las estrellas se lo pasan bien en el lido...

Nacho Gonzalo (Coronado)