Conexión Oscar 2022: Las posibles sorpresas que nos podemos encontrar en las nominaciones
Querido Teo:
Tras las últimas predicciones de cara a las nominaciones de los Oscar 2022, la suerte ya está echada y por muchos pálpitos de última hora lo que ya está hecho no se toca, ahora ya sólo queda explorar algunas de las sorpresas (no tan sorpresas) que podríamos encontrarnos en la lectura de nominaciones del próximo martes. No es que las ediciones de los últimos años hayan arrojado muchas pero siempre hay, al menos, un par de nombres que se llevan toda la atención por caerse cuando nadie lo esperaba o por, finalmente, entrar entre los candidatos. Estas son algunas de las apuestas rompequinielas.
Kenneth Branagh (“Belfast”) fuera de mejor dirección
Es una de las inercias que va cobrando fuerza en las últimas horas tras la omisión en los Bafta y por el hecho de que la Academia nos ha sorprendido en los últimos años a dejar fuera del quinteto, en favor de algún nombre internacional, a directores de algunas de las películas favoritas. Es lo que ha ocurrido con Ben Affleck (“Argo”), Martin McDonagh (“Tres anuncios en las afueras”), Peter Farrelly (“Green book”), Bradley Cooper (“Ha nacido una estrella”) o Aaron Sorkin (“El juicio de los 7 de Chicago”), sobre todo cuando su labor en esta faceta no es a tiempo completo y han probado la dirección pero se les conoce más por ser actores o guionistas. En ese perfil encaja un Kenneth Branagh al llevar a cabo un proyecto muy personal pero al que él le imprime más ínfula de autor de la que realmente tiene, siendo una dirección mucho más convencional que las de Jane Campion (“El poder del perro”), Steven Spielberg (“West Side Story”), Denis Villeneuve (“Dune”) y Paul Thomas Anderson (“Licorice pizza”). Por un lado “Belfast” podría seguir siendo favorita al Oscar sin esta nominación y por otro así podría haber hueco para una presencia internacional de la que este año tiene todos los números Ryûsuke Hamaguchi (“Drive my car”) y de la cual se está abonando la Academia los últimos años.
Julia Ducournau (“Titane”) en mejor dirección
Aunque pueda parecer incongruente (teniendo en cuenta la división que genera una cinta que ya fue apeada de la carrera a mejor película internacional) los Bafta han vuelto a poner a la directora en el mapa siendo la única nominación de la cinta. Un hecho que podría volver a repetirse en los Oscar porque sería una manera de reconocer la transgresión, valentía y locura abordada por una directora que ha entrado en los anales de la Historia como la segunda mujer en ganar la Palma de Oro del Festival de Cannes. Parece poco probable pero si los Oscar se ponen juguetones y quieren ampliar su mira internacional, más allá de Hamaguchi o Almodóvar, Ducournau puede ser una opción aunque da la impresión de que para que entre, al menos, tendrían que caer dos de los favoritos (Branagh y Spielberg, por ejemplo).
“Madres paralelas” en los principales apartados
El destino está haciendo que pueda volver a repetirse punto por punto lo vivido hace 19 años entre “Hable con ella” y “Los lunes al sol”, ahora “Madres paralelas” y “El buen patrón”. A pesar de que la no designación de la película de Pedro Almodóvar fue un jarro de agua fría para la cinta (no hay más que ver las reacciones en Twitter del productor Agustín Almodóvar), el nombre de Pedro Almodóvar se ha impuesto a este golpe y la cinta ha ido ganando peso en las últimas semanas de carrera con una Penélope Cruz y un director que han estado muy volcados en la promoción de la cinta. A pesar de no haber estado presente Penélope Cruz en ningún premio importante, la actriz sí que ha tenido alguna mención crítica de peso (Los Angeles y NSFC) y su estatus y respeto queda patente que está muy por encima en la industria de Hollywood que el de otras opciones (véase Kristen Stewart) lo que, junto al predicamento que tiene el director manchego en Hollywood, podría aupar a la película a categorías más allá de las de actriz protagonista como las de guión original y, quién sabe, si dirección y/o película.
Mahershala Ali (“El canto del cisne”) en mejor actor
Sin hacer ruido Mahershala Ali se ha convertido en uno de los actores más reconocidos de los últimos años. 2 Oscar en apenas un lustro e, incluso a pesar de protagonizar una cinta que nadie ha visto, eso no ha impedido a que se haya metido en la carrera a última hora. Sus nominaciones en el Globo de Oro y en los Bafta no hay que tomárselas a broma, más teniendo en cuenta que el actor lleva a cabo una interpretación muy a flor de piel encarnando a un hombre diagnosticado con una enfermedad terminal a quien se le ofrece la posibilidad de cambiar su situación para evitarle el sufrimiento a su familia. Teniendo en cuenta que la quinta plaza de mejor actor no tiene dueño no tendría que sorprendernos de que finalmente él fuera el que se hiciera con ella.
Jennifer Hudson (“Respect”), Alana Haim (“Licorice pizza”) y/o Emilia Jones (“CODA: Los sonidos del silencio”) en mejor actriz
La carrera de mejor actriz ha ido dando muchas vueltas desde que hace un mes fuera descabezada cuando el Gremio de Actores (SAG) decidió dejar fuera de sus candidaturas a Kristen Stewart (“Spencer”), una favorita de la que alguien construyó inercia y todos le siguieron. En estos momentos nadie cuenta ya con Stewart, a pesar de la fuerte campaña promocional en redes, más teniendo en cuenta el gran número de intérpretes que pelean por el puesto. Una de ellas, si la Academia sigue abrazando su vertiente más convencional, podría ser Jennifer Hudson que, a pesar de que sólo fue favorita el fin de semana de Agosto en el que se estrenó la película, fue rescatada por el Gremio de Actores (SAG) y que lleva a cabo una de esas interpretaciones que cumplen la fórmula más obvia para los premios. En todo caso interpretar a todo un icono como Aretha Franklin, y ser una antigua ganadora del Oscar, pesa a favor. En cambio, en el caso de que la Academia quiera aupar a nuevos nombres y dejar de lado interpretaciones tan calculadas podría abrirse paso a la frescura de Alana Haim (“Licorice pizza”) y Emilia Jones (“CODA: Los sonidos del silencio”), a las cuales los Bafta les ha dado alas.
Caitríona Balfe (“Belfast”) en mejor actriz
Si el año pasado nadie se esperaba lo de Lakeith Stanfield compitiendo como actor de reparto (cuando había sido promocionado como protagonista y sin tener ninguna nominación previa durante la carrera) menos rocambolesco sería lo de ver a Caitríona Balfe nominada como actriz protagonista. Al principio de la carrera la distribuidora no tenía muy claro donde ubicarla y finalmente se decantaron por la opción más fácil que era la de asegurar la nominación (y quién sabe si premio) en el apartado de secundaria. Tal y como ha evolucionado la carrera, y con una categoría de mejor actriz apasionante, no tendría que sorprendernos ver a la protagonista de la serie "Outlander" ocupando una de las plazas en la categoría de protagonista. Ha estado presente en todos los premios de la temporada y desde luego que poco podría cuestionarse su inclusión.
Jesse Plemons (“El poder del perro”) en actor de reparto
Aunque el quinteto de mejor actor de reparto parece sólido en realidad sólo hay tres nombres asegurados como son los de Kodi Smit-McPhee (“El poder del perro”), Troy Kotsur (“CODA: Los sonidos del silencio”) y Ciarán Hinds (“Belfast”). En cambio los eslabones más débiles son los de Jared Leto (“La casa Gucci”), ante la extravagancia de su interpretación, y Bradley Cooper (“Licorice pizza”), afectado por ser poco más de un cameo. Aupado por el Bafta, y dentro del runrún de las últimas horas, a pesar de haber estado eclipsado durante toda la carrera, Jesse Plemons podría terminar entrando por su papel en “El poder del perro” como contrapunto noble al personaje de Benedict Cumberbatch y refugio emocional para el de Kirsten Dunst. Uno de los actores más solicitados (y que mejor elige) del momento que podría encontrar una recompensa inesperada pero que sólo haría que certificar su brillante porvenir.
Marlee Matlin (“CODA: Los sonidos del silencio”) en actriz de reparto
Hay cierta sensación de que en la categoría de mejor actriz de reparto pueden ocurrir cosas siendo Ruth Negga (“Claroscuro”) la posible damnificada ya que, a pesar de que ha estado muy presente en la carrera, la cinta de Rebecca Hall no ha tenido la visibilidad que merecía a nivel general. Eso podría beneficiar a tres actrices cuya candidatura sería muy simbólica. Ante la fuerza de “CODA: Los sonidos del silencio” es extraño que Marlee Matlin, ganadora del Oscar por “Hijos de un dios menor” en 1987, no haya tenido más visibilidad pero también es el tipo de interpretación que acaba entrando.
Ann Dowd ("Mass") y Judi Dench ("Belfast") en actriz de reparto
Lo mismo ocurre con Ann Dowd (“Mass”), que tendría que ser la ganadora del Oscar indiscutible pero que ha sufrido una campaña demasiado pobre por parte de su distribuidora Bleecker Street, avivada cuando ya era demasiado tarde. Al menos ésta sí que ha conseguido una nominación al Bafta que se le ha negado a Judi Dench que, inexplicablemente, a pesar de ser una de las bazas de la cinta favorita de este año ha sido totalmente ninguneada en todos y cada uno de los premios, incluso cuando su último plano es el que termina encerrando la esencia de la película. ¿Terminará alguna de las tres dando la sorpresa?
“Fue la mano de Dios” en más apartados además de película internacional
Con el predicamento que tiene Paolo Sorrentino en la industria, algo que ha ido “in crescendo” en los últimos años, y contar con la maquinaria de Netflix, es sorprendente que el nostálgico recorrido de descubrimiento vital que lleva a cabo el director italiano en “Fue la mano de Dios” no haya tenido un mayor calado. Destinada a ocupar este año el nicho internacional, si no hay sorpresa ha sido Japón quien ha agarrado esa antorcha, la realidad es que la cinta de Sorrentino cuenta con pocas posibilidades para poder ganar en mejor película internacional y todavía menos para entrar en película y dirección. ¿Quién sabe? Nunca hay que apostar en contra de un director venerado y respetado que quizá no entre a lo grande pero podría tener alguna agradable mención en guión original, fotografía o diseño de producción.
Nacho Gonzalo