"Two lovers"

En la web oficial queda más que evidente el retraso que ha sufrido el estreno de la película en nuestro país porque el DVD ya se comercializó en USA el año pasado. Tenemos el trailer, galería de fotos, material de prensa, información de los actores, etc... La web en español tiene una bonita panorámica de Nueva York para pasar al trailer, a la información de los actores y algunas imágenes. También puedes participar en un concurso para ganar un kit de maquillaje y de máquinas tecnológicas.

El argumento: Leonard, un joven con problemas emocionales, vuelve al hogar de su infancia en Brighton Beach, Brooklyn, para reponerse tras su última recaída. Mientras trata de recuperarse bajo la atenta mirada de sus preocupados padres, dos mujeres entrarán en su vida. Michelle, una bella y sensual vecina con un halo de misterio que parece no encajar en el aburrido barrio donde vive Leonard y la encantadora y sencilla Sandra, hija del nuevo socio de su padre. El amor de Leonard se debatirá entre la complicada y emotiva Michelle y Sandra, la chica perfecta a ojos de su familia.

Conviene ver: “Two lovers” es la demostración del talento del director James Gray, realizador de todavía poco renombre que no hace más que recibir parabienes críticos por sus películas. Algunas de ellas deudoras del mejor Coppola. El director cambia de estilo y pasa del thriller sólido y potente al drama romántico con claroscuros. Toques sentimentales, pesimistas y sombríos para un triángulo amoroso en el que destacan los tres actores y la conseguida atmósfera que les rodea. La dirección es elegante y la puesta en escena desangelada, melancólica y sugerente. Nueva York está viva, es un personaje más en sus películas, fotografiada con tonos fríos, negros profundos, todo fluye de una manera excepcional. Gray es un gran narrador de historias pero también es sombrío, incómodo y turbio. Sus relatos respiran autenticidad y personalidad, con un tono taciturno, inédito y absorbente. Gray apuesta por un ritmo de dirección pausado, sobrio, sereno y elegante que recuerda a Clint Eastwood. Sin artificios y con mucha verdad. Es una película en la que importan las miradas y en la que el guión funciona como un reloj. Un debate entre la pasión y el conformismo a la hora de encarar una relación amorosa. Joaquin Phoenix no puede estar mejor acometiendo una personalidad bipolar. Quizás es el mejor papel de su carrera. Gwyneth Paltrow sorprende y madura como intérprete en un papel de dulce peligroso. El conflicto familiar y la soledad también están muy presentes en una película que, sin dejarte un poso feliz, te hace salir satisfecho del cine por la sensación de haber visto una muy buena película. Cine del bueno en un drama romántico lleno de fuerza, alma y reflexión.

Conviene saber: James Gray ha convertido a Joaquin Phoenix en su actor fetiche después de contar ya con él en sus dos anteriores trabajos: “La otra cara del crimen” y “La noche es nuestra”.

La crítica le da un SIETE