"Late night", el show de Emma Thompson y Mindy Kaling

Querido Teo:

"Late night" es otro título que ha llegado directamente a Movistar+ tras quedar inédita en las salas españolas y en la temporada de premios en general ya que estamos ante una de las comedias del año desmontando el concepto de rom-com en base a lo que marca los cánones de estos tiempos y con una mala leche e ingenio que deja a esta cinta en una gozosa combinación entre “El diablo viste de Prada” y la serie “Rockefeller Plaza” salpicado de un guión con vivencias personales sacadas de las entretelas de “The office”. Y es que una película que junta la gracia e ingenio de Mindy Kaling con el oficio y ganas de pasárselo bien de Emma Thompson (nominada al Globo de Oro 2020 por este trabajo) no puede salir mal.

Amazon se hizo con los derechos de distribución de la película tras su paso por el Festival de Sundance 2019 por 13 millones de dólares siendo el nuevo trabajo de la directora Nisha Ganatra, acostumbrada a comedias televisivas y alguna cinta de comedia de perfil bajo. Lo que hace destacar sobre la media a “Late night” es contar con Mindy Kaling como protagonista y guionista, una de las mujeres que ha revolucionado la comedia USA haciendo virtud el enarbolar la minoría de las etnias y es que el guión de esta cinta bebe mucho de su propia experiencia ya que Kaling logró hacerse un hueco con sólo 24 años como la única guionista mujer dentro del equipo de 8 que formaban parte de la serie “The office”. Con el tiempo pasó a ser productora de la serie y también actriz dando vida al personaje Kelly Kapoor. Por su trabajo de productora y guionista consiguió 6 nominaciones al Emmy entre 2007 y 2011.

“Late night” se centra en un programa nocturno de entretenimiento de esos que son tan populares en Estados Unidos (y que en España tienen réplica en “El hormiguero”, “Late motiv” o “La resistencia”) y que cuenta con la veterana Katherine Newbury (Emma Thompson) encabezando un programa aborregado, alejado de la calle y de las redes sociales y que no hace más que caer en audiencia. Newbury es una estrella televisiva pero ya es una reliquia del pasado habiéndose asentado en su imagen de señora inglesa blanca, clasista, caduca y sin sentido del humor. Y es que no tiene ningún interés en conocer a los que trabajan con ella y por ello no mantiene ninguna comunicación con un equipo de guionistas que no ha visto nunca, en el que todavía piensa que hay gente que murió hace cinco o seis años, y a los que cataloga por números y no por sus nombres reales a la hora de dirigirse a ellos.

A ese equipo llega Molly, una chica de origen hindú apasionada del mundo de la televisión pero sin ninguna experiencia en el medio ya que proviene de trabajar en una planta química. Buscando simplemente cubrir un hueco en pro de la diversidad para callar las bocas de los más críticos, es mirada con recelo y desdén por el resto de sus nuevos compañeros coincidiendo todo esto con el anuncio de que la cadena sólo da hasta final de temporada a Katherine para sustituirla una imagen más refrescante y acorde a los nuevos tiempos. Pretendiendo agarrarse a su espacio televisivo, Katherine, su equipo y el aire fresco que propone Molly tendrán que unirse afinando sus mayores habilidades para remontar la visibilidad del espacio y que Katherine pueda seguir con su programa manteniendo el resto su puesto de trabajo.

“Late night” pasa de puntillas por la guerra entre los programas nocturnos pero funciona muy bien en el “timing” cómico de Thompson y Kaling tanto juntas como por separado. Es un homenaje al papel de la comedia que con elegancia y cierto clasicismo muestra cómo dos mujeres intentan surcar el amplio océano del mundo del espectáculo frente a las olas de las audiencias, el machismo y la celeridad de los nuevos tiempos en los que lo que interesa al público medio es más el youtuber de moda que garantiza "likes" que la actriz o cantante de prestigio consolidado. Es impagable la entrada de Molly en su primer día de trabajo y las discusiones dentro de ese particular ecosistema acostumbrado a que les pidan 50 ideas al día y que, para ellos, ya sea un éxito que sólo una sea tenida en cuenta. Y es que donde brilla la cinta es a la hora de mostrar a una mujer como Katherine que no sólo tiene que adaptarse a losnuevos tiempos sino que ello implica también abrirse emocionalmente en una época de las redes sociales en la que tu público quiere definirte, saber cómo eres y cómo piensas y, además, comprobar que tienes facilidad para reírte de ti mismo.

“Late night” tiene guiños a los cánones de los nuevos tiempos apostando por la comedia rápida, ágil e incisiva en un escenario de monólogos, sketches y peajes televisivos contando con el cameo de Seth Meyers, uno de los presentadores de la televisión nocturna más populares en USA, e incluso con dardos a cómo el mundo del espectáculo tiene esa doble moral con el #MeToo o con el hecho de que actores como Tom Cruise o Sean Penn tengan, al borde de los 60 años, personajes que son emparejados con actrices mucho más jóvenes haciéndonos creer que son novios desde la infancia. La cinta también ha conseguido un reparto de secundarios de lujo con John Lithgow, Denis O´Hare, Hugh Dancy, Amy Ryan, Max Casella o Paul Walter Hauser que, sabiendo que son satélites de las dos protagonistas, las acompañan con tanta generosidad como eficacia.

Una cinta que enarbola la bandera de la comedia en el que hay mucho de catarsis (algo que también es ironizado en la cinta) pero también mordacidad sobre la cultura audiovisual contemporánea y el papel de la mujer en los medios, acostumbradas a ser arrinconadas, cuestionadas y cosificadas. Y en la película hay romance, por supuesto, tanto incipiente como confirmado tras el paso de los años, con su punto de sensiblería tamizada, pero eso es lo de menos ya que la historia se basa en la evolución de dos personajes que se agarran a aquello que les hace felices superando prejuicios y a base de persistencia y decisión. El guión de Mindy Kaling y el trabajo de Emma Thompson convierten a “Late night” en todo un placer que se ve de una manera muy agradable y entretenida cosa que, en los tiempos que corren, ya es mucho.

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Nacho Gonzalo