BSO de "1917"
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Querido Teo:
La banda sonora de "1917" es una de las candidatas a llevarse el Oscar este año y, aunque sus rivales son grandes competidoras, como la magnífica composición para "Joker" de Hildur Guðnadóttir, el hecho de que la Academia tenga una cuenta pendiente con Thomas Newman tras haber estado tantas veces nominado, sin conseguir finalmente la estatuilla, le hace en esta ocasión ganar puntos en las apuestas como posible vencedor.
Newman, que ya había trabajado con Sam Mendes en “American Beauty” y "Camino a la perdición", es uno de los compositores más polifacéticos del panorama cinematográfico actual. Se ha desenvuelto con soltura en todos los géneros y, al tiempo que cambia de registro, mantiene su propia esencia y una huella reconocible en todo cuento hace.
Para “1917”, Newman ha compuesto una banda sonora que fluye a la par que la trama, otorgando todo el protagonismo a la acción. En ese sentido, evita añadir drama o potenciar la tensión. No tiene nada que ver con otras bandas sonoras bélicas más frenéticas, como la de “Dunkerque”, por ejemplo. En este caso, es más intimista y menos visceral. Prueba de ello es Up the down trench con su sutil sonido de cuerda, la larguísima Milk o la casi imperceptible The Boche.
A pesar de esa tenuidad y sobriedad general, nos encontramos con otros temas que adquieren mayor presencia, en los que se mezclan el violonchelo, las notas electrónicas y hasta latidos de corazón, como Tripwire, Gehenna o Engländer.
A mitad de película escuchamos la canción Poor wayfaring stranger, cantada por un soldado del Segundo Batallón, cuya letra da sentido al momento de la misión en la que se encuentra inmerso el protagonista. Se trata de un tema folk que en el pasado fue interpretado por diferentes artistas, entre ellos Johnny Cash y Emmylou Harris. Funciona como una perfecta pausa para la reflexión y es un tema que también se incluyó en el trailer oficial de la película.
En general se trata de una banda sonora efectiva que, para lograrlo, no necesita abusar de recursos. Y es que... ¿acaso no hiela la sangre ese efecto de corte en seco de la música, en la última escena de uno de los dos protagonistas, más que la más vertiginosa de las melodías?
Pese a ser una buena banda sonora, ahora está en manos del jurado de los Oscar determinar si se quedará en la 15ª nominación de Thomas Newman, o en el primer Oscar de su admirable trayectoria.
Datos técnicos
1917
Thomas Newman
Sony Classical
Número de tracks: 19
Oigamos algunos fragmentos de la banda sonora.
Up the down trench (Track 2)
The night window (Track 5)
The big smoke (Track 6)
Blake and Schofield (Track 10)
María Machaquito
