"El joven Ahmed"
La web oficial.
El argumento: En la Bélgica actual, el destino del joven Ahmed, de apenas 13 años, se ha quedado atrapado entre los ideales de pureza del que le habla su imán y las pasiones de la vida.
Conviene ver: “El joven Ahmed” de Jean-Pierre Dardenne y Luc Dardenne es una película sobre un adolescente islámico que se mueve entre centros de acogida y una madre desesperada por no saber qué hacer con él mientras Ahmed se debate entre vivir como siente y seguir los ideales que le marca su imán generando una eterna contradicción que, ante la rebeldía de su comportamiento, le lleva a deambular sin raíces, afectos o apoyos más allá de los servicios sociales y enfrentado contras las mujeres, representantes del mal y el pecado para su religión, como es el caso de una madre a la que ve como una borracha, una profesora a la que tacha de apóstata y una adolescente como él que le hace negar el deseo por el hecho de no ser musulmana. Los Dardenne siguen utilizando la fórmula con la que llevan siendo nombres claves del cine europeo social de las últimas dos décadas con un cine muy de calle y de marcado carácter social pero que, en este caso, les queda repetitivo en un trabajo menor dentro de su filmografía que sin llegar al aburrimiento y poco interés de “La chica desconocida” (2016), intentando jugar en ese caso con el cine negro y de suspense con poca fortuna, tiene poca enjundia en una cinta que los hermanos belga resuelven en menos de hora y media sin mucho más desarrollo por su parte en el intento de volver a sus raíces introduciendo el matiz religioso y los peligros del radicalismo a la hora de hablar de dramas humanos y de que sea el espectador el que saque sus conclusiones de las diatribas de Ahmed, un adolescente del que su imán se aprovecha ante lo maleable de la edad, sin adoptar un tono ejemplarizante ni señalar caminos correctos pero sí alumbrando algo de esperanza si nos acompaña la actitud de querer salir hacia adelante, tenemos algo de fortuna y nos apoyamos en las personas clave para sacarnos del pozo aunque sea clave que para ello uno ponga de su parte para salir de su espiral de odio y radicalismo. Sobria y sin utilizar elementos externos como la música, no es que hayan hecho una mala película, sino que no pasa de efectiva dentro de los terrenos en los que mejor se mueven, sonando ya a vista e incluso demasiado superficial y desganada a la hora de indagar en la historia alejada de sus mejores trabajos como exponentes del cine social europeo aquí con el plus añadido del tamiz religioso tan presente en las sociedades fanatizadas de hoy en día y sobrevolando la pregunta del peligroso caldo de cultivo con el que pueden criarse unas nuevas generaciones que abocadas a esa influencia, y desarraigadas de todo, ya no tienen marcha atrás frente al crecimiento del yihadismo radical en Europa que se aprovecha de mentes débiles y traumatizadas. Un final abrupto y abierto garantiza la reflexión, sobre si hay posibilidad de redención o la perversión fanática es imparable, para un espectador arrollado por la inseguridad física y personal de los tiempos que ha tocado vivir y la fragilidad del sistema para combatirlos.
Conviene saber: Mejor director en el Festival de Cannes 2019 y mejor guión en el Festival de Valladolid 2019.
La crítica le da un CINCO