Conexión Oscar 2020: Telluride, conclusiones del primer escenario de la carrera
Querido primo Teo:
Este fin de semana la atención informativa ha estado en los Festivales de Venecia y Telluride que sirven como anticipo a lo que se vivirá en unos días en Toronto. Toca centrarnos en lo que ha dado de sí el certamen celebrado entre las montañas de Colorado y que supone la primera gran cita de la carrera. Básicamente porque es como la Comic-Con de los Oscar en donde las diferentes compañías muestran ante un número reducido de espectadores, con un número considerable de académicos entre ellos, algunas de sus grandes apuestas con el objetivo de generar el mayor ruido posible y perdurar a lo largo de estos próximos meses.
Las películas que salieron reforzadas tras su paso por Telluride en el 2018 fueron tres: “Roma” de Alfonso Cuarón, “La favorita” de Yorgos Lanthimos y “¿Podrás perdonarme algún día?” de Marielle Heller y tan solo la última fue un estreno exclusivo del certamen ya que las otras dos ya habían generado muy buenas impresiones en el Festival de Venecia, de hecho fueron las grandes vencedoras de la Biennale del 2018. Ni “First man” de Damien Chazelle (a pesar del Oscar a los mejores efectos visuales), ni “Destroyer” de Karyn Kusama (en donde Nicole Kidman hace una de las interpretaciones más memorables de su carrera) y muchísimo menos “El candidato” de Jason Reitman, que encontró en los parajes de Telluride el respeto que no halló en otro lugar, dieron más de sí en una carrera al Oscar que será recordada como una de las peores de los últimos años. La ganadora del Oscar a la mejor película fue “Green book” de Peter Farrelly que fue estreno y Premio del Público en el festival de Toronto.
Centrándonos en la cosecha del 2019. La primera gran conclusión que sacamos es que Netflix se ha convertido en el heredero de los hermanos Weinstein. El innombrable magnate de Hollywood fue el primero en ser consciente de lo que podía ser el público de Telluride (y eso que aún no se habían inventado las redes sociales ni la prensa estaba pendiente de lo que sucedía ahí) cuando en 1991 proyectó “Juego de lágrimas” de Neil Jordan así que lo convirtió en su laboratorio cosechando uno de sus mayores éxitos con “El discurso del rey” de Tom Hooper en 2010 que, días después de ser exhibido en Telluride, se alzó con el Premio del Público en el Festival de Toronto y meses después con el Oscar a la mejor película. El año pasado Ted Sarandos ya dio muestras de que había tirado la casa por la ventana y que iba a ir a por todas para lograr que Netflix consiguiera definitivamente el respaldo de los académicos, incluso de aquellos que no lo consideran cine y que por lo tanto abarata la marca Oscar. Reclutaron los servicios de Lisa Taback, la mejor consultora de campañas de la industria y ex brazo armado de Harvey Weinstein, que logró que Alfonso Cuarón materializara tres estatuillas con “Roma” gracias a convertirla en la película favorita de todo el mundo a pesar de que sus verdaderos datos de audiencia fueran una incógnita y sacar los trapos sucios de la competencia. Para este año han comenzado a allanar el terreno a“El irlandés” de Martin Scorsese, presente en Telluride para homenajear por sorpresa al actor Adam Driver, protagonista de “Historia de un matrimonio” la otra gran baza de Netflix para esta temporada de premios.
“Historia de un matrimonio” de Noah Baumbach enamoró a la crítica en el Festival de Venecia y gracias a su paso por Telluride se confirma como una de las aspirantes de esta carrera a las que sí hay que tener bajo el radar. El film protagonizado por Adam Driver y Scarlett Johansson, y que cuenta con una secundaria de la altura de la ya de por sí altísima Laura Dern, se verá en Toronto, Nueva York y Londres antes de su llegada a salas limitadas el próximo 6 de Noviembre, un mes antes de que llegue a las plataformas de Netflix.
Pero más que la “Kramer contra Kramer” de la generación millennial la verdadera sensación de Telluride 2019 ha sido “Un momento en el tiempo (Waves)” lo nuevo de Trey Edward Shults (responsable de “Krisha”) con el que la compañía A24 espera remontar el vuelo después de que la estratega Lisa Taback se largara con todo su equipo a Netflix. “Un momento en el tiempo (Waves)” es un musical en torno a dos parejas de adolescentes que crecen y se enamoran en un universo marcado por el dolor y la confrontación. Kelvin Harrison Jr. encabeza un reparto en el que también figuran Lucas Hedges y el cada vez más en alza Sterling K. Brown. Para Peter Debruge de Variety “Un momento en el tiempo (Waves)” es una de esas películas únicas entre un millón. También se verá en Toronto y su estreno está previsto para el 1 de Noviembre.
Si ha habido un nombre que ha brillado en esta edición de Telluride ha sido el de Renée Zellweger. Gracias a “Judy”, el biopic de Judy Garland en donde se repasa su último año de vida, la actriz ha sido una de las homenajeadas por el certamen y la crítica se ha rendido ante un trabajo en el que la Zellweger se ha fundido tanto con la Garland hasta el punto de desaparecer completamente. Su actuación ha generado mayor unanimidad que el film dirigido por Rupert Goold (responsable de la aclamada miniserie “The hollow crown”) al que se le achaca que no confíe del todo en sus posibilidades. También se verá en Toronto días antes de que llegue a los cines el próximo 27 de Septiembre.
Quedará por saber si el entusiasmo de Telluride es contagioso para que esta apuesta de Roadside Attractions llegue a mayores. Renée Zellweger puede vivir a sus 50 años su ansiado “comeback”. A inicios de los 2000 fue una de las actrices preferidas del mundo al encadenar las candidaturas al Oscar consecutivas al Oscar por “El diario de Bridget Jones”, “Chicago” y “Cold mountain” por la que se alzó con la estatuilla como actriz de reparto en el año 2004. Pero poco después se convirtió en una de las víctimas de la tiranía de la industria, pasó de ser una de las intérpretes más queridas a una de las más odiadas y ella tampoco se preocupó demasiado por revertir la situación.
El segundo que ha destacado ha sido Adam Sandler por su trabajo en “Diamantes en bruto” de los hermanos Benny y Joshua Safdie (“Good time”) en donde el actor encarna al propietario de una joyería que ha contraído una deuda que no puede afrontar después de haber sufrido un importante robo. “Diamantes en bruto” ha generado mayor unanimidad que “Judy”, cuenta además con la producción de Scott Rudin y Martin Scorsese, pero el hecho de que se le vaya la olla puede ir en su contra, de todas formas sí que hay consenso en torno a la interpretación de un Sandler que sabe sacarle partido a un hombre sumido en el pozo de la desesperación. Su estreno está previsto para Navidad y también se verá en Toronto.
Breves menciones para “The aeronauts” que supone el reencuentro entre Eddie Redmayne y Felicity Jones tras “La teoría del todo” y que está dirigida por Tom Harper. Este film de aventuras ha funcionado muy bien porque, aunque no sea ni de lejos un caballo a batir, sí que cumple con el objetivo de ofrecer un buen espectáculo sumamente entretenido y emotivo. También para “Los dos papas” de Fernando Meirelles, otro producto de Netflix, que recrea la abdicación del papa Benedicto XVI y la elección del vigente vicario de Cristo, el papa Francisco y que ha hecho reír y llorar a los espectadores gracias a la excelente dupla formada por Anthony Hopkins y Jonathan Pryce. Serán otros de los platos que se degustarán en Toronto.
Telluride no sólo se ha nutrido de éxitos y homenajes sino que también ha vivido sus descalabros. El más sonoro de ellos ha sido “Le Mans 66” de James Mangold que, aunque ha cosechado buenas críticas, era uno de esos títulos de los que se esperaba muchísimo más que una sucesión de clichés en donde Christian Bale sabe lucirse en un papel que una vez más se le ha hecho a medida. Otro pinchazo importante lo ha cosechado “Motherless Brooklyn” que supone el segundo trabajo como director de Edward Norton y que, aunque tanto su actuación como la de Willem Dafoe han sido bien reseñadas, ha recibido una respuesta bastante fría por parte de la crítica.
En las próximas semanas iremos viendo cómo evolucionan estas apuestas que han parecido salir reforzadas del Festival de Telluride.
Mary Carmen Rodríguez