"El rey león"
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El argumento: Tras el asesinato de su padre, un joven león abandona su reino para descubrir el auténtico significado de la responsabilidad y de la valentía.
No conviene ver: "El rey león" es la tercera apuesta de un clásico animado de Disney en acción real en lo que llevamos de año tras los ejemplos de "Dumbo" y "Aladdin". La taquilla estará de lado porque todo lo que tiene la marca de esta historia (tanto en cine como en Broadway) es carne de éxito siendo una de las cintas que más ahondan en el imaginario colectivo de los que fueron niños (y no tan niños) en los 90 con una cinta que con ecos shakesperianos contaba una historia de poder, alianzas, sacrificio, pasiones, traiciones, amor y sentido de la responsabilidad dejando escenas para el recuerdo (algunas siguen traumatizando a más de uno) y una música impecable (la cinta se llevó 2 Oscar en este aspecto en la edición de 1995). Esta nueva versión no es más que un calco de la original pretendiéndole añadir la espectacularidad del CGI en la recreación de escenarios e hiperrealidad en los rostros de los personajes. Ese es el principal fallo de la cinta que, más que tener una voz propia, abraza de manera desganada la propia copia pero sin la chispa, gracia e ingenio que tenía aquella, no sólo porque el reparto de voces estaba mucho más inspirado en la original, sino por el hecho de que esa jovialidad, ritmo y expresividad que tenía la película de los 90 (tanto en sus partes más dramáticas como en las puramente evasivas) no casan bien con unos animales que (precisamente al darles ese apabullante verismo) no transmiten lo que dicen. Y es que verlos cantar canciones con la boca pequeña y con unos movimientos limitados (la animación permite más virguerías) no ayuda a una cinta que pretende ser más profunda, dramática y adulta en su mensaje (aunque la otra ya tenía mucho de ello) pero su apabullante prodigio técnico no es suficiente para sacarle a flote, entre otras cosas porque volver a reescribir 25 años después lo que fue perfecto no tiene sentido, y más cuando existe rutina a la hora de abordarlo. Lo mejor de esta cinta son esas personas que rinden culto a su nostalgia y van a verla con los que les llevaron al cine hace 25 años.
Conviene saber: Jon Favreau dirige su segunda película siguiendo los cánones del cine animado de Disney tras el éxito que supuso “El libro de la selva” (2016).
La crítica le da un CUATRO