"Petra"

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El argumento: Petra no sabe quién es su padre, se lo han ocultado a lo largo de su vida. Tras la muerte de su madre inicia una búsqueda que le conduce a Jaume, un célebre artista plástico poderoso y despiadado. En su camino por conocer la verdad, Petra también entra en contacto con Lucas, hijo de Jaume, y Marisa, esposa de Jaume y madre de Lucas. A partir de ese momento, la historia de estos personajes se va entretejiendo en una espiral de maldad, secretos familiares y violencia que los lleva a todos al límite. El destino dará un giro a su lógica cruel abriendo un camino para la esperanza y la redención.

Conviene ver: En "Petra" Jaime Rosales imprime a esta historia con sabor a tierra, pasiones y secretos de un prisma de tragedia griega que va provocando un castillo de naipes con finos mimbres que amenaza con derrumbarse con cualquier giro imprevisto o revelación desvelada. Una cinta con la que el director se permite introducir algunas briznas de humor, hasta ahora una anomalía en su filmografía, a través de una serie de capítulos (desordenados) que parten del hecho de una mujer que, tras la muerte de su madre, busca encontrarse con los orígenes de un padre desconocido llevándole a Jaume, un pintor célebre, crápula y machista, así como a su esposa Marisa, con la que éste mantiene una intermitente relación, y el hijo de ambos, Lucas, el que parece más normal y natural de todos ellos. El papel del destino y de guardar las miserias bajo la alfombra, ante el temor que tienen los mismos personajes de vivir su vida con la verdad por bandera, acaba destruyendo a unos seres imperfectos pero que viven una vida marcada por las decisiones incorrectas que han ido tomando a lo largo de la misma, creando una costra que ha anquilosado la salubridad de cualquier relación familiar y amorosa normal y deseable. Atención a como se dibuja a ese pintor como un tótem que trata con natural pero imprevisible despotismo a su entorno, poco más que un cortijo de usar y tirar a su placer, satisfacción e interés. Estupendo ejercicio, tan juguetón como retorcido, en la que es la cinta más accesible del director hasta la fecha con unos magníficos Bárbara Lennie, Àlex Brendemühl, Marisa Paredes, Joan Botey y Oriol Pla.

Conviene saber: La cinta de Jaime Rosales se vio en la Quincena de Realizadores del Festival de Cannes 2018.

La crítica le da un SIETE