"My mexican bretzel"

La web oficial.

El argumento: Diario íntimo de una mujer de clase acomodada, Vivian Barrett, ilustrado por las filmaciones caseras de su marido León, un rico industrial, entre los años 40 y 60 del siglo pasado. La película es también un melodrama clásico a lo Douglas Sirk o Todd Haynes, con los sentimientos a flor de piel. Un viaje en volandas a través de la vieja Europa. Un ensueño romántico.

Conviene ver: “My mexican bretzel” se suma a la corriente de grandes documentales que nos ha ofrecido el cine español este año, muchos de ellos además óperas primas. En esta ocasión se nos evoca el poder de las imágenes y cómo a través de ellas se puede construir una narración distinta o alternativa de la que parte. Una imagen vale más que mil palabras y la sucesión de varias de ellas puede crear una historia, sea realidad o ficción, dejando claro por tanto la fuerza de su mensaje. La directora lleva a cabo un retrato femenino sobre el amor, la vida, el dolor, los sentimientos y la muerte como si adoptara el rol de una alquimista dando vida a las cintas grabadas por su abuelo seis décadas atrás en Suiza. Un juego que desmonta cualquier tópico y que enarbola el poder de la creación y la perspectiva, significado y simbolismo que pueden alcanzar las imágenes en una coctelera de emociones demostrando que el poder del creador para generar sensaciones es ilimitado.

Realidad y ficción se dan la mano en forma de diario íntimo en un viaje fílmico a través de un alma que se presenta ante el espejo y cuyos destellos interpretativos corren a cargo del público descubriendo un tesoro con el que se juega y moldea creando a un personaje fuerte que, como representante de las mujeres de la época, se presenta en la cinta sin voz lo que es un recurso muy potente. Un ensayo cinematográfico lleno de poesía que logra crear su propio mundo tan complejo como fascinante en el que cada detalle está sujeto a cómo lo procese cada uno según sus propias vivencias. Una banda sonora que interpela a las imágenes contribuyendo a sustentar una experiencia única que debe mucho al montaje y al cuidado trabajo sonoro que hace que el silencio imprima el conjunto dando prioridad a sonidos naturales y orgánicos.

Conviene saber: Un documental dirigido y escrito por Nuria Giménez Lorang y triunfador en la sección de cine español del Festival de Gijón 2019 con los premios de mejor película, dirección y guión.

La crítica le da un SIETE