"Isla de perros"

La web oficial.

El argumento: Después de que todas las mascotas caninas de Megasaki City sean exiliadas a una isla que es un vertedero, un niño de 12 años emprende un viaje para buscar a su perro extraviado.

Conviene ver: "Isla de perros" nos devuelve al imaginativo, estilístico y minucioso universo de Wes Anderson en su regreso a la animación en stop motion materializado en un trabajo de cuatro años para levantar una cinta que bebe más de “El Gran Hotel Budapest” que de “Fantástico Sr. Fox”. Anderson depura un estilo que lleva a esta cinta no a ser la mejor filmografía pero sí a llevar a buen puerto una propuesta sobre la soledad, la camaradería y la impersonalidad de un mundo que no entiende de afectos ni de compromisos. Exquisita y emocional, Anderson aprovecha para homenajear al cine oriental en una sucesión de guiños que no escapan del cine de Kurosawa llevándolo a la analogía de los tiempos actuales como la corrupción, el capitalismo y el drama de los refugiados en el que los humanos hablan en japonés y los perros en inglés (imprescindible por tanto la versión original). La música de Alexandre Desplat es un personaje más de una película milimétricamente dialogada, con altas dosis tanto de ternura como de humor negro, y que nos lleva a un nuevo mundo pero quedando la personalidad y el estilo de Anderson claramente definido. A destacar la fusión e integración de los cinco perros protagonistas con sus voces Chief (Bryan Cranston), Rex (Edward Norton), King (Bob Balaban), Boss (Bill Murray) y Duke (Jeff Goldblum) en esta presentación guiñolesca del teatro kabuki en forma enarbolada de reivindicación y rebelión perruna ante el particular genocidio llevado a cabo por las directrices orientales que sólo buscan un enemigo al que culpar de todos los problemas de la sociedad contemporánea (¿Cataluña?, ¿Corea?, ¿Rusia?, ¿Siria?). Una fábula social vistosa y efectiva en una cinta llena de lecturas y tan deliciosa como escalofriante que, aun así, es poco arriesgada argumentalmente y que, siendo un esfuerzo loable y titánico, queda por debajo de otras cintas del director más imaginativo y reconocible del cine reciente.

Conviene saber: Mejor director en el Festival de Berlín 2018.

La crítica le da un SIETE