"Frozen, el reino del hielo"

La web oficial tiene una animación que nos lleva del verano al invierno como el hechizo de la película. Tenemos trailer, información de los personajes, la banda sonora y un storybook.

El argumento: Cuando una profecía condena a un reino a vivir un invierno eterno, la joven Anna, el temerario montañero Kristoff y el reno Sven emprenden un viaje épico en busca de Elsa, hermana de Anna y Reina de las Nieves, para poner fin al gélido hechizo.

Conviene ver: "Frozen, el reino del hielo" es la vuelta al gran Disney clásico y musical de los 90 tras algunos tímidos intentos (no tan brillantes) como los de "Bolt", "Tiana y el sapo" y "Enredados". Esta película hace superar todas las expectativas gracias a un trailer que no es nada representativo de lo que vamos a ver y que incluso le hace un flaco favor asemejándola a la típica película de animación tontorrona con personajes secundarios cargantes. Nada más lejos de la realidad. La película está técnicamente cuidada al máximo y es rica en detalles. La protagonista vuelve a ser una princesa rodeada de secundarios empáticos (atención a ese muñeco de nieve que quiere vivir en verano), pero ahora se vale por si misma y hay mucha más profundidad psicológica que en otros trabajos actualizándola a los nuevos tiempos y el conjunto es muy disfrutable tanto por la historia que nos propone como por ese viaje musical y casi nostálgico propio de los grandes momentos de la compañía. Además, lo que cobra protagonismo es la relación entre las dos hermanas y no el romance o el habitual intento de "pillar marido" de la protagonista. Desde luego que los que crecieron con el Disney de los 90 la disfrutarán muchísimo y se frotaran los ojos con un viaje a las emociones que hace muchos años que no era tan satisfactorio en el campo animado. Una película que es digna heredera de su gran legado, puliendo las mejores características del mismo, y dando un paso más quitándole edulcorante y añadiéndole frescura acercándolo a un público lo más amplio posible que es difícil que no salga hechizado por una de esas películas que tiene la etiqueta de gran éxito navideño. Aunque llega a un final evidentemente predecible, no se puede negar su energía y frescura a lo largo del metraje. Una joyita estupenda y llena de magia con una banda sonora que es de las mejores que ha tenido nunca una cinta Disney reciente sin necesidad de haber contado con Alan Menken y siendo, casi más que una película, un puro espectáculo de Broadway que ofrece un batido equilibrado de humor, aventura, música y drama. Una pena que el hecho de que el cine animado USA llegue en mayor parte doblado nos prive del buen trabajo en versión original de Kristen Bell e Idina Menzel.

Conviene saber: Chris Buck (“Tarzán” y “Locos por el surf”) y Jennifer Lee (guionista de esta cinta y de “¡Rompe Ralph!”) dirigen una historia que adapta el cuento de Hans Christian Andersen.

La crítica le da un SIETE