"El ciudadano ilustre"
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El argumento: Es la historia de un escritor argentino, Premio Nobel de Literatura, que hace cuarenta años abandonó su pueblo y partió hacia Europa, donde triunfó escribiendo sobre su localidad natal y sus personajes. En el pico de su carrera, el alcalde de ese pueblo donde nació le invita para nombrarle "ciudadano ilustre" del mismo, y él decide cancelar su apretada agenda y aceptar la invitación.
Conviene ver: “El ciudadano ilustre” es una cinta con mucha sorna e inteligencia sobre un escritor condecorado por el Nobel que viaja a su pueblo natal (Salas) para recibir el título que da nombre a la película. El problema es que se encuentra con un mundo muy alejado de lo que es ahora en el que más que añoranza hay rechazo en esa visita tras mucho tiempo intentando dejarlo atrás, aborreciendo el lugar de sus orígenes y haber utilizado a sus lugareños como meros instrumentos para su obra. Contraste social y cultural de una cinta que juega con esos tópicos pero de una manera más cínica, sobria y crepuscular que las comedias que últimamente se han abonado a este recurso. Una cinta autocrítica y mordaz de carácter universal que arroja una gran interpretación de Óscar Martínez (“Relatos salvajes”, “Capitán Kóblic”) y que pone el foco tanto con amargura como con agudeza en el peso de la fama y como es recibida tanto por los que la sufren como artistas y los que la jalean como público fiel y muchas veces profundamente hipócrita formando parte de una comunidad rural representada tan iletrada como pasional y populista. Buen cine latinoamericano que destaca sobre todo por su ingenio, vena caustica que reparte a todos, y por la interpretación de su protagonista y al que sólo se le puede achacar una puesta en escena demasiado pobre acentuando demasiado ese tono opresivo.
Conviene saber: Mejor actor para Óscar Martínez en el Festival de Venecia 2016. Mariano Cohn y Gastón Duprat son los directores de una cinta que es la representante de Argentina hacia el Oscar 2017 y que ganó la Espiga de Plata y el premio al mejor guión en la SEMINCI de Valladolid 2016.
La crítica le da un SIETE