"Psicosis". El rodaje.
Querido diario:
Ya estoy vestido para "Psicosis". La hacemos todos los jueves en la sala de terapias. Se pone la peli sin sonido y los enfermos decimos los diálogos según el papel que nos toque. El doctor Quintanilla dice que así nos desfogamos y la verdad es que funciona.
Esta es la peli más famosa del sádico gordito que era don Alfredo y también una de las más baratas. Hitchcock pretendía desde el principio hacer la película tan barata como fuera posible. Deseaba producir un thriller de bajo presupuesto, que fuera mejor y más barato que todos los demás thrillers de bajo presupuesto que estaban haciéndose aquel año, decidió utilizar su equipo y sus estudios de televisión y contratar a los actores de la forma más barata posible. Anthony Perkins le debía una película a la Paramount y podía ser contratado por un precio razonable, del mismo modo que Janet Leigh (que, como Perkins, estaba ansiosa por trabajar con Hitchcock), John Gavin (otro artista de la Paramount) y Vera Miles, que, imaginó Hitchcock, podía trabajar en el film puesto que de acuerdo con su contrato estaba recibiendo un sueldo semanal en cualquier caso.
Hitchcock era siempre tan rácano con los salarios como lo era con las alabanzas. Aprovechaba que las carreras de la gente sufrían un impulso fuerte por estar en sus películas, conseguía negociar los sueldos más bajos. Sus ayudantes más valiosos recibían habitualmente lo mínimo permitido. Por otra parte, era capaz de mostrar una repentina preocupación por la situación económica de sus colegas... siempre que a él no le costara dinero. El guionista Ernest Lehman recuerda esa beneficencia de segunda mano del director.
"Un día Hitch me dijo que creía que la MGM debería pagarme por mi historia original de "Con la muerte en los talones". Yo le dije que no esperaba nada al respecto... después de todo, yo tenía un contrato fijo con los estudios por el que cobraba semanalmente". Como resultado de tenderme esa mano, la MGM me pagó una bonificación de 25.000 dólares. Evidentemente no tenía por qué haber hecho aquello, pero era capaz de tener esos repentinos y memorables arrebatos de generosidad. Estoy seguro de que mucha gente se sintió impresionada por esas sorprendentes e impulsivas acciones suyas."
De todos modos, los empleados de Hitchcock aceptaban normalmente cobrar sueldos por debajo de lo habitual... quizá como signo de admiración hacia su jefe, quizá con la esperanza de seguir trabajando para él. Fuera cual fuese la motivación, todos sabían que los sueldos de los actores, especialmente los de las estrellas más importantes, lo ponían furioso.
Aquí puedes escuchar sobre el famoso rodaje...
PsicosisRodaje.mp3